Hoja de ruta de siete puntos aprobaron los presidentes, entre ellos una investigación de la situación fronteriza. Maduro: Triunfó la sensatez, el diálogo y la paz. Santos: La mejor forma de combatir las mafias es con esfuerzos conjuntos.
La hoja de ruta que fijaron los presidentes Nicolás Maduro y Juan Manuel Santos tiene dos decisiones concretas, la vuelta inmediata de los embajadores, aunque la frontera seguirá cerrada a la espera de una “normalización progresiva”.
Tras más de seis horas de encerrona, el anfitrión, el mandatario ecuatoriano, Rafael Correa, fue el encargado de leer los siete acuerdos iniciales, que incluyen además: realizar una investigación de la situación de la frontera, reunir a los equipos de ministros mañana 23 de septiembre en Caracas, la coexistencia de los modelos de cada país y el respeto en la relación bilateral. Así como “fortalecer el diálogo bilateral, y continuar trabajando con el acompañamiento de Ecuador y Uruguay”.
No hubo mención a la situación cambiaria, uno de los temas clave que traía Venezuela a Quito.
En el salón de los banquetes de la presidencia ecuatoriana, la mesa se dispuso para Santos y Maduro en cada esquina, y los mediadores, Correa y el presidente de Uruguay, Tabaré Vázquez, en el centro, tras un encuentro del cual apenas si hay fotos y, ni por asomo, un apretón de manos entre Maduro y Santos.
“La reunión se dio en un clima de hermandad, muy franca, clara, quien triunfó hoy fue la sensatez, el diálogo, la paz de nuestros pueblos”, dijo el Presidente venezolano en medio de aplausos de las delegaciones presentes.
Maduro agregó que con “voluntad política sí se puede (…) a nuestro pueblo le digo, no hay cabida para el odio, la intolerancia, ni para el revanchismo, el único espacio es para el diálogo”.
El Jefe del Estado venezolano agradeció a los presidentes Correa y Vásquez, a la Celac y a Unasur por “haber logrado con gestiones hechas con autenticidad y transparencia que el presidente Santos y mi persona nos encontráramos. Tuviéramos esta extraordinaria oportunidad de, con franqueza y la verdad de cada quien, echar las bases de un nuevo inicio, reinicio pudiéramos decir, de las relaciones basadas en la cooperación, el respeto y el enfrentamiento común de los problemas que tenemos entre ambas Repúblicas”.
Maduro también dio las gracias a Santos “por el diálogo que hemos tenido y espero que con el cronograma que hemos aprobado podamos ir atendiendo los problemas e ir despejando todos los asuntos que hay en la frontera y mas allá”.
El último derecho de palabra lo tuvo el presidente Juan Manuel Santos. “Se presentaron los incidentes que todos conocen y no han debido pasar, expusimos cada uno nuestra visión y nuestra verdad”.
“Respetamos las decisiones del Gobierno de Venezuela, pero pedimos respeto a los derechos de los colombianos”, agregó Santos. Reiteró que Colombia está en disposición de combatir las mafias de la frontera “y la mejor forma es hacerlo juntos, así somos más efectivos”. “Nos une la lucha contra el contrabando, las bandas criminales y la ilegalidad. Somos países hermanos”, concluyó Santos.
El presidente Correa fue el encargado de leer el comunicado conjunto. Aseguró que “ambos Jefes de Estado se comprometen a construir un acuerdo que solucione los problemas de la frontera común, orientado a la fraterna convivencia, la buena vecindad, el mutuo respeto y el desarrollo económico y social”.
Al final de la declaración conjunta no hubo preguntas, el presidente Correa tomó las manos de Maduro y Santos para acercarlas, la imagen de mayor cercanía entre los mandatarios que aprobaron una hoja de ruta cuya próxima cita será mañana a nivel ministerial en Caracas.
FUENTE.PANORAMA