El presidente del Bloque de Prensa Digital de Venezuela expresa que igualmente se prohíben las “manipulaciones mediáticas” que pudieran “fomentar Zozobra”, “alterar el orden público”, “ irrespetar a los Poderes Públicos o personas que ejerzan dichos cargos” o “aquellos que pudieran inducir al magnicidio“. Asimismo, se prohíben los mensajes “que pudieran incitar o promover el odio y la intolerancia por razones religiosas, políticas, diferencia de género, racismo o xenofobia… discriminatorios… contrarios a la seguridad de la Nación… o anónimos“. Circunstancias y eventos que definirán y decidirán entidades del propio gobierno entre ellos la Comisión Nacional de Telecomunicaciones (Conatel) quien “podrá ordenar a los proveedores de servicios de Internet, restringir el acceso a mensajes y portales divulgados”.
Estas medidas significarían eventualmente que un sinnúmero de sitios en la web, o en las redes sociales, venezolanos deberán quedar fuera de la red.
Se llega al colmo de querer eliminar hasta una forma de ser y de sentir del venezolano como lo es el hecho de “prohibir el doble sentido”: El artículo 6 incluiría un cuarto tipo de elementos de lenguaje donde cataloga como Tipo D, o sea, prohibida su publicación, a las “expresiones que denoten un doble sentido” en relación a la sexualidad.
Esta situación es totalmente inadmisible y estamos convocando al Bloque de Prensa Digital de Venezuela a una reunión extraordinaria para fijar una posición común y decidir las medidas que tengamos que tomar en defensa de la plena libertad de expresión que hasta ahora ha significado la información transmitida en Internet.