JERUSALEN.- Una obra del artista finlandés Janei Leinonen, que representa a Ronald McDonald crucificado, provocó protestas violentas de la minoría árabe-cristiana de Israel. Aunque ‘McJesus’ se exhibe en el Museo de Arte de Haifa desde agosto del año pasado, las manifestaciones de repulsa se desataron solo la semana pasada.
Empezaron con un cóctel molotov lanzado contra el edificio del museo, el jueves, y continuaron con enfrentamientos violentos de cientos de cristianos que el viernes exigieron la eliminación de la escultura, informa The Jerusalem Post.
Según datos de la Policía israelí, como resultado de estas acciones un hombre fue detenido y tres agentes sufrieron lesiones por piedras lanzadas por manifestantes. Las autoridades dispersaron a la multitud con gases lacrimógenos y granadas de aturdimiento.
Christian Palestinians protesting in front of the Haifa Museum to the sculpture “McJesus” by Finnish artist Jani Leinonen, depicting Ronald McDonalds clown on the cross. pic.twitter.com/7mZH0nq7Nz
— The Wolf Report (@thewolfreports) 12 de enero de 2019
Respeto a la religión vs. libertad de expresión
El lunes, representantes de la iglesia cristiana de Israel llevaron sus quejas a un tribunal de distrito, al que exigieron que ordene la eliminación de las piezas más ofensivas de la exhibición, incluido el ‘McJesus’. Los cristianos representan un pequeño porcentaje de la minoría árabe de Israel y dicen que enfrentan desafíos únicos. «Si esta obra estuviese dirigida contra los no cristianos, el mundo se pondría en contra», opina Wadie Abu Nassar, asesora de líderes de la iglesia.
La exigencia fue apoyada por la ministra de Cultura israelí, Miri Regev, quien también pidió la eliminación de las obras de arte «irrespetuosas».
No obstante, el director del museo, Nissim Tal, dijo a AP que estaba sorprendido por el repentino alboroto, especialmente porque la exhibición —que tiene la intención de criticar lo que muchos consideran el culto al capitalismo como rasgo actual de la sociedad— ha estado abierta durante meses.
De este modo, el museo se ha negado a retirar el ‘McJesus’, alegando que eso atentaría contra la libertad de expresión. Pero tras las protestas del viernes, empleados colgaron una cortina sobre la entrada de la exhibición y colocaron un cartel que decía que el arte no está destinado a ofender.
«Esto es lo máximo que podemos hacer», aseguró Tal. «Si eliminamos el arte, al día siguiente tendremos políticos que nos exigirán que eliminemos otras cosas y terminaremos solo con coloridas fotos de flores en el museo», añadió.
Las medidas tomadas por la institución no sirvieron de mucho para aplacar a los manifestantes: el lunes, uno de ellos permaneció acampado en las inmediaciones, en una tienda, con un cartel que decía «Respeta las religiones». Otros manifestantes enarbolaron cruces con carteles.
‘McJesus’ sculpture causes uproar in Haifahttps://t.co/w54SXv6Sm8 pic.twitter.com/9Qx4Igj0Po
— Ma’an News Agency (@MaanNewsAgency) 12 de enero de 2019
«Esto es muy ofensivo y no puedo considerarlo arte», declaró el artista y devoto cristiano Amir Ballan. «Continuaremos a través de reuniones pacíficas y vigilias con velas… No nos quedaremos callados hasta que lleguemos a una solución», concluyó.
Más allá del museo
En lo que se refiere al autor de la controvertida obra, Jani Leinonen, ya en octubre pasado pidió que su ‘McJesus’ fuera eliminado de la exhibición, decisión que tomó tras unirse al movimiento Boicot, Desinversiones y Sanciones (BDS), que globalmente apunta a presionar a Israel para que cambie sus políticas hacia los palestinos. Después de las protestas, el artista finlandés se dirigió al museo por segunda vez para insistir en que se retirara su obra.
«Israel utiliza abiertamente la cultura como una forma de propaganda para encubrir o justificar su régimen de ocupación, colonización y apartheid sobre el pueblo palestino. Por lo tanto, no deseo ser parte de esta exposición, y le pedí al museo que sacara de ella mi obra», declaró Leinonen a The Jerusalem Post.
Por su parte, una portavoz del Museo de Arte de Haifa afirmó que no estaba segura de si el curador de la exhibición, Shaked Shamir, ha recibido dicha solicitud del artista.