“Mi ropa de hoy está inspirada en ‘Alicia en el País de las Maravillas’. Sí, no te rías”, explicó Venus, número cuatro del mundo, al intentar describir el en realidad indescriptible atuendo de hoy en su victoria sobre la checa Sandra Zahlavova, 97 del ranking, en un sufrido 6-7 (6-8), 6-0 y 6-4.
La falda, cortísima, ofrecía el salpicado de colores de un pintor decidido a volcar desordenadamente toda su paleta en un bastidor. Bajo ella, unas medias color carne generaban a distancia confusión, y quizás emociones excesivas, algo que ya sucedió en mayo en Roland Garros. Sobre la cintura, una especie de blusa amarilla con múltiples aberturas frontales contribuía seguramente más a la ventilación de la atleta que a su imagen.
“Le pongo mucha reflexión a mis diseños. Amo la fantasía, y esto fue una manera de expresar quién soy en la cancha”, aseguró Williams, que a sus 30 años tiene cada vez más entusiasmo por el diseño de indumentaria y menos por el tenis, el deporte que la llevó al número uno y la hizo famosa mundialmente junto a su hermana Serena.
Que lo exhibido hoy en el Rod Laver Arena de Melbourne por Williams permita entender mejor quién es ella en la cancha podría ser una afirmación riesgosa. Pero a ella le gusta el riesgo, probablemente por eso insiste.
“Es una especie de sorpresa, porque cuando Alicia se mete en el hoyo del conejo encuentra todas esas cosas que son tan sorprendentes”.
“Este diseño se trata de mostrar una sorpresa en cuanto a indumentaria de tenis, también de mostrar algo de piel. Fue divertido”, añadió Williams, que está volviendo al tenis tras meses ausente en la segunda parte de 2010 debido a una lesión.
Mientras se divierte, el torneo avanza para Venus, que tiene la final de 2003 como mejor resultado en Australia. Aunque no todo es tan divertido: hoy, en medio del partido, debió ser atendida por el dolor que le generó impactar un revés furibundo. Y entonces se entrevió que quizás sepa más de diseño que de anatomía.
“¿Cuál fue la lesión exactamente?”, le preguntaron.
“Psoas. Supongo que una distensión o algo así…”.
“¿Qué es eso?”, le preguntó el periodista.
“Un músculo”, respondió la jugadora.
“¿Está en el abdomen o en la parte superior de la pierna?”.
“Psoas”, insistió lacónica la deportista.
“No soy médico”, contraatacó el periodista, que recibió una respuesta acorde: “Tampoco yo, pero está en la zona de la ingle o algo así, ya sabes”.