“Se viene trabajando entre las partes un proyecto de acuerdo para alcanzar un arreglo amistoso, que debe anunciarse en los próximos días”, reza el texto oficial.
En abril de 2008, el Ejecutivo venezolano ordenó la nacionalización de las plantas cementeras y en agosto de ese año anunció la expropiación de la filial de la mexicana Cemex, responsable de un 50% de la producción local de cemento.
Desde entonces, las partes mantienen un litigio internacional ante el Centro Internacional de Arreglo de Diferencias Relativas a Inversiones (Ciadi) del Banco Mundial.
El gobierno venezolano ya logró acuerdos monetarios con las otras dos cementeras presentes en el país, la francesa Lafarge y la suiza Holcim.
En el comunicado, el ministerio venezolano recordó que el Ciadi ya negó medidas cautelares solicitadas por la cementera mexicana para evitar que Venezuela tome posesión de más activos de la empresa.
El pasado 30 de diciembre este organismo del Banco Mundial reconoció que tenía jurisdicción para ocuparse del caso.
“La decisión del Tribunal no implica condena alguna contra nuestro país, ni se pronuncia sobre el fondo del asunto vinculado al ejercicio soberano del Estado venezolano sobre la ordenación de las empresas productoras de cemento”, subraya el ministerio en el texto.
Hace algunos meses, el ministerio mexicano de Relaciones Exteriores manifestó que promovería el diálogo entre Cemex, tercera cementera del mundo, y el gobierno venezolano para buscar soluciones a este conflicto.
El gobierno del presidente Hugo Chávez ha nacionalizado desde 2007 sectores estratégicos de la economía como el petróleo, la electricidad, las telecomunicaciones, la siderúrgica y la industria cementera.