“A la burguesía le da piquiña cuando hablamos de Cuba. ¡Vamos a hablar de Cuba por todos lados! ¡Viva Cuba, viva Cuba, viva Cuba!”, aseguró el presidente Hugo Chávez cuando llegó a Caracas el ministro cubano Ramiro Valdés para ayudarle a manejar la severa crisis energética por la que atraviesa el país. “Lo que pasa es que cuando vienen los cubanos la furia contrarrevolucionaria se desata y empiezan a decir un conjunto de estupideces”, respondió Chávez a las versiones sobre un creciente descontento en el interior de su gobierno por la masiva llegada de gente de Cuba a cargos importantes.
Pero la dimisión del ministro de Salud el miércoles, Carlos Rotondaro, podría confirmar lo que el presidente se niega a aceptar. Según el periódico El Universal, Rotondaro habría renunciado tras nueve meses de gestión por “su rechazo a la incursión de cubanos en posiciones estratégicas del Ministerio de Salud y de los hospitales públicos del país”.
Sería la tercera dimisión por los mismos motivos. La semana pasada, el vicepresidente y ministro de Defensa, Ramón Carrizalez, y su esposa Yuribí Ortega, ministra de Ambiente, renunciaron también por su negativa a la invasión cubana. Versiones de prensa señalaron que Chávez quiere incorporar militares cubanos en las filas del ejército venezolano. Incluso, informan, que su guardia personal está compuesta, en su mayoría, por isleños.
Este jueves, durante la presentación del nuevo ministro de salud, Chávez insistió en que estos rumores son “una locura” y dijo que Rotondaro se había ido “por motivos de salud”. Señaló, además, que Luis Reyes Reyes, un comandante del ejército que lo acompañó durante el fallido golpe militar que encabezó en febrero de 1992 contra el entonces presidente venezolano Carlos Andrés Pérez, será el hombre que concrete el proyecto de salud que inició con el apoyo cubano hace 10 años.
Técnicos, médicos y libros
Según datos de las autoridades de La Habana, hay 65 mil isleños en Venezuela. Desde la firma del Convenio de Cooperación entre ambos países en octubre de 2000 su presencia es cada vez más notoria. En abril de 2001 llegaron 6.000 médicos cubanos a la misión Barrio Adentro y para 2003 la cifra llegaba a 30.000. En 2006 se duplicó el número de especialistas procedentes de La Habana: 6.525 técnicos en diversas áreas terminaron viviendo en tierras venezolanas. Luego, arribaron 5.544 preparadores deportivos y cerca de 8.000 profesores, pues la educación es una de las áreas a donde más ha llegado la cooperación cubana. Tanto que el Ministerio de Educación venezolano ha dirigido varios cursos a directores de planteles educativos basados en textos editados en La Habana y Moscú, según informó Leonardo Carvajal, coordinador de la Asociación Asamblea de Educación.
La penetración de Cuba en Venezuela es tan grande que el director del diario Tal Cual señala en un editorial que su país hoy es “Cubazuela”. El diario El Nacional dio a conocer un documento que revela que los cubanos están en las Fuerzas Armadas, en educación, salud, electricidad. “Están en todo, Cuba es el agente de compras de Venezuela en el mundo, además disfruta del petróleo y nadie conoce las cuentas. Sin exagerar, Venezuela es una colonia de Cuba”, señala el periódico.
Simón Alberto Consalvi, ex ministro de Relaciones Exteriores venezolano, dice que a su juicio son más de 100.000 los cubanos que han llegado a su país. “Con todo el extremismo reinante en el gobierno de Chávez la influencia cubana los está dividiendo. El presidente no confía en los venezolanos, su guardia personal es cubana y ellos controlan las salas de crisis en Miraflores. La seguridad de Chávez, en una palabra, depende de los cubanos”.
Según escribió Roger Noriega, subsecretario de Estado para América Latina del gobierno de George W. Bush, desde hace años hay miles de cubanos en Venezuela asesorando a Chávez. “Su única intención es controlar el aparato de seguridad del Estado venezolano”. advierte.
El Espectador