Cuarta el año anterior, Somalia se encaramó este año primer puesto después de registrar 566 «ataques terroristas» que dejaron un total de 1.437 muertos entre junio de 2009 y junio de 2010, precisó la empresa especializada Maplecroft, que elabora anualmente este ránking en función de la frecuencia y de la intensidad de los atentados, así como de los antecedentes de cada país.
Justo detrás se sitúan en este orden Pakistán, Irak y Afganistán, todos ellos en el grupo de 16 países incluidos en la categoría de «riesgo extremo» en el que también figura Colombia en el sexto lugar.
Yemen, que sube 13 puestos, entra por primera vez en esta categoría con un total de 109 atentados, tras un «aumento muy significativo del número de incidentes terroristas en su territorio» en el periodo estudiado.
«Al Qaida en la Península Arábiga (AQPA) suscita una alarma creciente entre los servicios de inteligencia occidentales cuando el grupo trama más atentados en el extranjero», señaló Maplecroft en un comunicado.
La ramificación de Al Qaida en Yemen reivindicó recientemente el envío de dos artefactos explosivos procedentes de Yemen y con destino a Estados Unidos interceptados a finales de octubre en aeropuertos de Dubái y el Reino Unido.
Grecia, que en los últimos años tuvo que hacer frente a una ola de violencia protagonizada por grupos radicales que se autoproclaman guerrillas urbanas, pasa del puesto 57 al 24, y supera por primera vez a España (27º) como primer representante europeo en esta lista de 196 países.
Ambos se codean en el grupo de «riesgo alto» con países como Irán (17º), Nigeria (19º), Georgia (21º) o Kenia (26º).
Potencias como Estados Unidos (33º), Francia (44º) y el Reino Unido (47%) integran la siguiente categoría, la de «riesgo medio», en la que figuran también varios países latinoamericanos: Chile (30º), Honduras (31º), Perú (35º), Venezuela (37º), Ecuador (40º) y Paraguay (46%).
Bolivia (59º), Panamá (63º), Brasil (64º), Guatemala (76º), Argentina (88º), México (96º), El Salvador (113º), Costa Rica, Cuba, República Dominicana, Nicaragua y Uruguay (todas en el 117º) se consideran países con «riesgo bajo», según Maplecroft.