La directora del INDH, Instituto Nacional de Derechos Humanos chileno, Consuelo Contreras, aseguró este miércoles que la situación de los cientos de venezolanos retenidos en la frontera entre Chile y Perú «es altamente vulnerable».
«La situación de los venezolanos en la frontera es altamente vulnerable, debe permitírseles inmediatamente el ingreso a Chile», subrayó Contreras, quien este miércoles se trasladó con un equipo de INDH hasta la frontera con Perú para constatar las condiciones de los venezolanos.
Cientos de venezolanos que solicitan refugio se encuentran acampando en la carretera, en la Línea de la Concordia, que separa a ambos países en espera de que las autoridades chilenas aprueben su ingreso.
Contreras aseguró a los periodistas que las condiciones «son preocupantes dada la alta vulnerabilidad en que se encuentran las personas. Se les está mandando a la ciudad peruana de Tacna a hacer una serie de trámites que dificultan su admisión», aseveró.
Aseguró que aproximadamente 90% de las personas que están en esa zona cuentan con familiares en Chile «que tienen su documentación al día y que esperan su llegada».
Contreras advirtió que muchas personas solicitan refugio por razones políticas, como militares que desertaron y ex funcionarios del gobierno venezolano, a quienes se les ha impedido el ingreso, y que han visto peligrar su vida y su integridad física y psíquica, «por lo que se les debe dejar ingresar inmediatamente».
Señaló que su organismo evalúa la ejecución de acciones legales para que las aproximadamente 400 personas puedan ingresar a Chile.
«Nos preocupan especialmente los niños y las mujeres, que según testimonios han sido insultadas y maltratadas. Un principio fundamental de los derechos humanos es la dignidad de las personas, por lo que esperamos que los funcionarios policiales y las autoridades, la respeten», sostuvo.
Asimismo, Contreras alertó sobre el eventual surgimiento de redes de trata y tráfico de personas que se aprovechen de la vulnerabilidad de las personas migrantes, particularmente de niños y mujeres.
«Nos preocupa también que muchas personas están ingresando por pasos no habilitados, sabemos que hay muchos sectores minados –minas antipersonales que fueron sembradas por los militares durante la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990)–, lo que es sumamente peligroso para ellos», añadió Contreras.
Informó que este jueves se trasladará a Tacna para entrevistarse con Gustavo Díaz, cónsul de Chile en la ciudad peruana, «para conocer exactamente los requisitos que se están solicitando».
Con el mismo objetivo y en paralelo, dos equipos del INDH se trasladaron uno al Paso de Colchane, en la frontera con Bolivia, y el otro al Paso de Los Andes, en el límite con Argentina, para saber del estado de los ciudadanos venezolanos que intentan cruzar la frontera por razones humanitarias.
Este lunes, el SJM, Servicio Jesuita a Migrantes, criticó al gobierno chileno por mantener a estos cientos de venezolanos en las fronteras del norte del país sin permitirles el ingreso.
El director del SJM, José Tomás Vicuña, quien advirtió que hay lactantes que llevan cuatro días a la intemperie sin alimentación, cuestionó cómo es posible que luego de hablar más de un año de la violación de los derechos humanos en Venezuela «los chilenos hagan esto».
«Los derechos humanos no son hasta que me convenga. Venezuela vive una situación muy compleja. A estas personas se les daba dar la posibilidad de refugio, porque vienen de un lugar donde hay conflictos internos y violaciones de los derechos humanos», agregó.