«Con esta vuelta queremos mostrar que los 7.000 millones de habitantes de este planeta necesitan energía renovable y una movilidad limpia», dijo Palmer.
«El petróleo se está agotando, la crisis del clima se avecina, y todos vamos a contrarreloj», añadió.
La vuelta al mundo, llamada «Zero Race», planea hacer una parada en la conferencia mundial del clima de Cancún en noviembre, después de atravesar Europa, Rusia, China, Canadá y Estados Unidos, y antes de emprender el camino de vuelta a Ginebra en enero de 2011.
Cada vehículo eléctrico puede viajar al menos 250 kilómetros con una sola carga.
Están obligados a consumir nomás la electricidad que cada equipo ha generado o adquirido de fuentes renovables como la eólica, la solar o la hidroeléctrica.