Según la fuente, citada por la agencia india IANS, “Laila” tocó tierra en el estado suroriental indio de Andhra, y causó daños graves en las infraestructuras, así como en las rutas de trenes, las comunicaciones por móvil y la electricidad.
Los vientos llegaron a ser de 125 kilómetros por hora, acompañados por una lluvia intensa y olas que llegaron a ser de dos metros e inundaron los pueblos costeros.
Aunque la tormenta se debilitó al tocar tierra, una fuente oficial relató que el organismo meteorológico ha apreciado un repunte de la depresión, más al norte, en la costa de la Bahía de Bengala y a la altura del colindante estado de Orissa.
Las autoridades, sin embargo, creen que el ciclón se ha debilitado en las últimas horas, y que por lo tanto reducirá su impacto, de acuerdo con el director general del departamento indio de meteorología, A.K. Tyagi.
“Estamos todavía analizando los daños causados por el ciclón en la parte costera de Andhra”, dijo un funcionario del departamento de gestión de desastres en la ciudad de Hyderabad (sur), capital de Andhra.
Las autoridades indias habían evacuado a más de 50.000 personas antes de la llegada del “Laila”, y habían emitido una orden de alerta para 777 pueblos en las áreas costeras de Andhra.
La India ha desplegado a unos 500 efectivos de la Fuerza Nacional de Respuesta a los Desastres y varios helicópteros están listos para el supuesto de que fuera necesario iniciar operaciones de rescate.