“Creemos que los usuarios valorarán con el tiempo una licencia original de Windows y es por eso que les haremos más fácil tener una copia legítima”, mencionó Myerson durante una entrevista con la agencia internacional de noticias Reuters.
Las computadoras con Windows 7 o Windows 8 que cuenten con las siguientes especificaciones técnicas podrán actualizar, de manera gratuita por un año, a Windows 10:
Procesador: 1 GHz o superior
RAM: 1 GB para versiones de 32-bit o 2 GB para la de 64-bits
Espacio en disco duro disponible: 16 GB
Tarjeta de gráficos: Microsoft DirectX 9 con WDDM driver
Cuenta de Microsoft y, obviamente, conexión a Internet.
Según Myerson, Windows 10 aún no tiene una fecha exacta de llegada al mercado, lo único que es cierto es que será durante el verano de este año y que llegará a 190 países en 111 distintosidiomas, es decir, será un lanzamiento que abarcará prácticamente todo el mundo.
La estrategia que ahora sigue Microsoft bajo la dirección de Satya Nadella resulta por demás ambiciosa e interesante, ya que, difícilmente, un usuario con una copia pirata de Windows se negará a tener la más reciente versión del sistema operativo si es que se la están ofreciendo de manera gratuita y original, por lo que, con el paso de los meses, el número de copias apócrifas irá disminuyendo, convirtiendo esto en un gigantesco acierto para la compañía de Redmond en contra de la piratería en todo el mundo.
Unocero