El presidente del Parlamento afirmó que la oposición acató el pedido de los mediadores del Vaticano de evitar movilizaciones que puedan derivar en choques y enfrentamientos
La oposición suspendió hoy la marcha que había convocado el próximo jueves hasta el Palacio de Miraflores, sede del Gobierno de Nicolás Maduro, a petición de la Iglesia venezolana y el Vaticano, informó hoy el presidente del Parlamento, Henry Ramos Allup.
«La Conferencia Episcopal, el propio cardenal (Jorge) Urosa, y el Vaticano nos ha pedido (…) que los eventos y marchas programados para el próximo jueves de parte y parte, sean suspendidos y nosotros creemos que es sensato acatar a fin de evitar cualquier choque, cualquier confrontación», dijo Ramos Allup a periodistas en el Parlamento.
Esta decisión busca además evitar «la contaminación de este procesó que hemos llamado inicio del diálogo», agregó.
La oposición venezolana inició el domingo pasado un proceso de diálogo con el Gobierno de Nicolás Maduro auspiciado por la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) y el acompañamiento del Vaticano.
La presencia de la Iglesia católica ha sido determinante para que la alianza opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD) aceptará ir a la mesa con el Gobierno, pese a que buena parte de sus partidarios se opone al diálogo.
Ramos Allup aseguró que la alianza no teme del «costo político» de tomar esta decisión porque «las direcciones políticas tienen que asumir con coraje las decisiones, y todas las decisiones políticas tienen un costo».
En este momento «las personas percibirán como mucho más responsable hablar claramente y tomar decisiones claramente, que andar elusivamente inventando pretextos», indicó.