«El Mundial: los machetes amenazan», tituló recientemente un periódico sensacionalista británico, avisando a los 370.000 extranjeros que viajarán al Mundial de la posibilidad de que estalle una «guerra racial» en el país.
En Internet, una empresa ha comercializado incluso chalecos especialmente preparados en caso de agresión con arma blanca, destinados a los hinchas que vayan a viajar al primer Mundial absoluto de fútbol en suelo africano.
Sudáfrica cuenta con una de las tasas más elevadas de muertos, con 40 asesinatos anuales por cada 100.000 habitantes, según la Organización Mundial de la Salud (OMS).
El pasado año, de los 870.000 visitantes o residentes británicos en Sudáfrica, sólo 139 necesitaron asistencia consular, una cifra muy inferior a la de otros países.
En Sudáfrica, un 80% de los asesinatos tienen lugar entre personas que se conocen. En el 50% de los casos, se trata de disputas que se generan a causa del alcohol», explica Gareth Newham, del Instituto para los Estudios sobre Seguridad (ISS).
La mayor parte de crímenes se concentran en los barrios más pobres, que los turistas no suelen visitar. «Es por eso que la gente que viene a nuestro país no vive normalmente ninguna experiencia violenta», indica.
A pesar de que los datos son muy bajos en crímenes y asesinatos, los robos sí son algo más frecuentes.
Parte de los riesgos podría llegar por parte de extranjeros y se teme especialmente en el país la llegada de 3.000 ‘hooligans’ británicos, un fenómeno desconocido en un lugar donde el fútbol suele transcurrir en un ambiente totalmente festivo.
af / Reporte360