Señaló que el personal de la acería apoya el levantamiento de los cortes de energía en la zona industrial de Valencia, estado Carabobo, pero «no entendemos porqué se nos relega», sobre todo, porque Sidor suministra a muchas de esas empresas los insumos para sus productos acabados, así lo informa el diario El Nacional.
En noviembre, el Ejecutivo ordenó a la siderúrgica y empresas del aluminio disminuir el consumo de electricidad para recuperar los niveles del embalse de la central Guri, afectado por la sequía del fenómeno climatológico El Niño.
En diciembre, la cuota definitiva de consumo a reducir en la siderúrgica quedó en 420megavatios, lo cual llevó al cierre de la línea de producción de palanquillas y la reducción de operaciones de la planta de planchones.
Alcocer destacó que los sidoristas interpretan la posición de mantener el racionamiento eléctrico como «una actitud hostil del Ejecutivo Nacional hacia la región Guayana, traducida en una política de Estado dirigida a cerrar definitivamente las empresas básicas, situación que debe ser revertida».
El sindicalista destacó que rechazan el convenio del gobierno venezolano con Cuba, el cual permite a la isla -cuya población padece hace 50 años un permanente racionamiento- suministrar plantas termoeléctricas con una tecnología atrasada.
Alcocer indicó que el presidente de la acería cubana estuvo en Sidor «para conocer las características de los productos fabricados por nosotros y quedó asombrado con el adelanto tecnológico de la acería venezolana respecto a la de su país», lo cual llevó a anular la medida de importar palanquillas cubanas para los procesos industriales de la Siderúrgica del Orinoco.
Resolución
El Ministerio de Energía Eléctrica se apura con la resolución que obliga a reducir 20% el consumo energético a los grandes consumidores de la Gran Caracas, lo cual sustituye el plan original de racionamientos totales en la región capital de cuatro horas diarias, informaron fuentes allegadas al despacho.
Por otra parte, el presidente de la Federación de Trabajadores Eléctricos, Ángel Navas, indicó que el nuevo programa para la Gran Caracas recoge los planteamientos de Fetraelec al ministro, Alí Rodríguez Araque, sobre lo inconveniente de aplicar racionamientos de energía indiscriminados que perjudican usuarios residenciales y sectores sensibles de la población.
Mantenimiento es muy caro
Además de un precio mayor (hasta 1.500 dólares) por el kilovatio instalado, el costo de mantenimiento de las plantas de generación distribuida suministradas por Cuba es mucho más costoso que las centrales térmicas de gran capacidad de generación.
Técnicos del sector que solicitaron el anonimato, informaron que las plantas traídas de Cuba funcionan a alta velocidad, lo cual implica una revisión cada 5.000 horas de uso y hacerles el mantenimiento mayor correspondiente. «En las plantas de generación térmica de gran tamaño (800 o más megavatios de potencia instalados) la revisión se realiza cada 10.000 a 20.000 horas porque funcionan con turbinas y a una velocidad menor», indicaron los especialistas consultados.
Asimismo, señalaron que las empresas eléctricas no cuentan con personal suficiente para hacerle la limpieza a tiempo a los filtros -que se saturan de combustible- de las mini plantas que conforman los grupos electrógenos diseminados en el país, muchos de ellos distantes entre sí o en zonas de difícil acceso.
Las centrales térmicas grandes operan con combustibles (gasoil, fuel oil y gas) más económicos que el diesel consumido por los módulos electrógenos, cuya capacidad instalada de generación de los módulos electrógenos oscila entre 15 y 30 Mw-.
mr / Reporte360