Murray “abandonó a un paciente que confió en él, le administró fármacos potencialmente peligrosos (…) y no mostró ningún sentimiento de arrepentimiento, lo cual significa que sigue siendo un peligro”, dijo el juez Michael Pastor en la Corte Superior de Los Ángeles.
El doctor de 58 años “podía simplemente haberse negado” a administrarle a Jackson las drogas que le pedía, “así como hicieron otros doctores”, agregó.
Miembros de la familia Jackson, incluyendo los hermanos del cantante La Toya, Jermaine y Randy, estaban en el tribunal de Los Angeles para escuchar la sentencia del juez Michael Pastor a Murray, declarado el 7 de noviembre culpable de homicidio involuntario.
La Toya Jackson escribió en Twitter que espera que Murray reciba una pena de, al menos, cuatro años.
“Esperando que Murray reciba lo que se merece, lo máximo MÁS!!!!” escribió en Twitter, mientras Randy Jackson hizo la “V” de la victoria cuando ingresó en el edificio de la Corte Superior de Los Ángeles.
Jackson murió el 25 de junio de 2009 a los 50 años por una sobredosis de propofol, un anestésico que se usa para prácticas quirúrgicas y que el doctor le administraba casi diariamente para ayudarlo a combatir su insomnio.
Los fiscales quieren que Murray reciba la pena máxima y que se le ordene indemnizar en casi dos millones de dólares a la familia Jackson por la pérdida de ingresos del cantante, quien al momento de morir preparaba una serie de conciertos en Londres.
Pero Ed Chernoff, abogado de Murray, pidió la semana pasada que el cardiólogo quede en libertad condicional y brinde servicios comunitarios, subrayando que probablemente ya no pueda volver a ejercer la medicina.
“Condenar a una pena de cárcel prolongada a este exdoctor, descrito por todos los que lo conocen como un hombre gentil que dedicó su vida profesional a brindar atención a la población marginada, sería totalmente inapropiado”, escribió en el texto presentado en la corte.
La madre de Conrad Murray también pidió al juez Pastor que sea misericordioso con su único hijo. “Creo que sin duda está aprendiendo la lección más dura de su vida”, escribió Milta Rush, en una carta publicada por el sitio de celebridades TMZ el lunes.
“El nunca tuvo problemas con la ley antes y yo apenas puedo sostenerme en pie, estoy asustada y muy preocupada por la posibilidad de que sea encarcelado”, agregó, según TMZs.
De todos modos, medios de prensa señalan que es improbable que pase un solo día en prisión debido a una reciente ley californiana contra la sobrepoblación carcelaria y, en ese caso, podría quedar bajo arresto domiciliario.
El jurado de siete hombres y cinco mujeres decidió unánimemente que Murray es culpable de homicidio involuntario tras deliberar poco más de un día.
Luego de escuchar la decisión del panel, el juez Michael Pastor ordenó la detención sin derecho a fianza del médico de 58 años.
Pero Murray tendrá que enfrentarse a la severidad del juez: días después de que se leyera el veredicto, se supo que el médico dio una entrevista para un documental mientras el proceso estaba en curso, cuando todos los implicados en el caso tenían estrictamente prohibido hablar de él con periodistas.
El fiscal David Walgren dijo que la entrevista televisiva respalda su afirmación de que Murray “mostró una completa ausencia de remordimiento por causar la muerte de Michael Jackson”.
En la mañana del 25 de junio de 2009, Murray administró a Jackson propofol luego de que otros sedantes no surtieran efecto durante la noche. Luego el doctor -quien recibía un sueldo de 150.000 dólares al mes- se ausentó de la habitación del artista y, al volver, lo encontró aparentemente sin vida.
Murray decidió no testificar en su juicio, pero el jurado escuchó la grabación de una entrevista que dio a la policía, en la que afirmó que había salido del cuarto sólo dos minutos para ir al baño.
No obstante, durante el proceso que duró seis semanas se constató en cambio que en ese período había estado hablando por teléfono con una serie de amigas.
Además, no llamó a la emergencia inmediatamente cuando vio que Jackson no respondía y, cuando lo hizo, no informó a los paramédicos cuáles fármacos le había administrado.
El documento presentado por la fiscalía esta semana señala que, si hubiera sobrevivido, el cantante podría haber ganado 100 millones de dólares en los conciertos que iba a dar Londres, por lo que pide una compensación para los hijos de Jackson de 1,8 millones de dólares.