«Compromisos de alto nivel”, así quedaron bautizados el 30 de octubre los acuerdos a los que gobierno y oposición podrían llegar para destrancar el juego y empezar la mesa de diálogo. La liberación de los presos políticos fue uno de ellos. En un primer momento se habló de 25 personas, pero el oficialismo redujo la lista a 11 y garantizó que antes del 11 de noviembre sacaría del Sebin a otras 60.
El diputado de AD, Williams Dávila, lo confirmó y lamentó que hasta ahora solo se hayan liberado a cinco y no de manera plena, sino con medidas cautelares. “En la lista estaban Antonio Ledezma a quien, por ley, le corresponde libertad sin condiciones. A Daniel Ceballos se le daría casa por cárcel, al igual que a Leopoldo López”, indicó Dávila, quien participó ayer en la reunión del Parlasur, en Uruguay, en la que se acordó un plan de ayuda en medicinas a Venezuela, otro de los aspectos que forma parte de las exigencias de la MUD al gobierno en el diálogo.
Los diputados del Bloque de la Patria, Saúl Ortega (PSUV) y Yul Jabour (PCV), rechazaron el gesto de Mercosur con el argumento de que “no hay crisis humanitaria”.
El segundo “compromiso de alto nivel” es la solución del conflicto de los diputados de Amazonas, en el cual el Tribunal Supremo de Justicia instaría al Consejo Nacional Electoral a convocar a nuevas elecciones y, así, lograr que la Asamblea Nacional pueda funcionar y ser reconocida por el Ejecutivo. En respuesta, la MUD postergó la declaratoria de responsabilidad política contra el presidente Nicolás Maduro y la suspensión de la marcha hasta Miraflores.
El secretario ejecutivo de la MUD, Jesús “Chúo” Torrealba, aseguró que una vez que se cumpla el lapso acordado hasta el 11 de noviembre para que el gobierno dé un “gesto de buena voluntad”, continuará la agenda planteada al país.
“¿Qué va a pasar después del jueves? Lucha. El pueblo democrático va a seguir ganando porque tener hoy al Vaticano involucrado en el conflicto es una victoria. Y también lo es haber sentado en la mesa a un régimen que ni siquiera quería reconocer la existencia y la legitimidad de la mayoría opositora”, expresó en el programa La fuerza es la unión, por RCR.
“Lo que viene –agregó– después del 11 de noviembre no es demagogia, paciencia y suicidio, sino estrategia, lucha de todos y victoria del pueblo democrático”.
Pateará la mesa. En respuesta al ex presidente de Uruguay, José Mujica, que exhortó a atender la crisis económica antes que buscar salidas electorales, el gobernador de Miranda, Henrique Capriles, señaló que la solución de la crisis económica depende de resolver la crisis política. “Mientras esté este gobierno, no vamos a resolver la crisis económica”, indicó Capriles, quien exigió un diálogo con resultados.
Afirmó que el ex presidente Ernesto Samper, secretario de Unasur —que envió una carta a la MUD y al gobierno para que no abandonen la mesa— no representa a los venezolanos. “Si no hay resultado, el gobierno pateará la mesa y se burlará de los venezolanos”, vaticinó.
El dirigente indicó que quienes desean un cambio en Venezuela deben luchar por ese objetivo. “Si no cambiamos, lo que pinta para el año que viene será feo”, advirtió.
Ganar tiempo. El ex representante de Venezuela en la Organización de Estados Americanos, Roy Chaderton, aseguró que el gobierno está completamente unificado con respecto al diálogo y que su éxito dependerá de la responsabilidad con que la MUD lo aborde.
Destacó que ganar tiempo para unas elecciones no es ningún pecado. “La salida no necesariamente tiene que ser electoral. Tenemos que ser serenos, discretos, responsables y transparentes entre nosotros mismos”, acotó. Aseguró que la mesa del diálogo podría verse afectada por la impaciencia de algunos sectores.