El presidente de Chile, Sebastián Piñera, venderá el canal Chilevisión, de su propiedad, luego de reiterados pedidos de aliados y opositores para que se deshaga de él y se dedique a gobernar, y ya ha notificado a sus aliados de la decisión, informó el diario La Tercera.
Según el diario, durante el fin de semana Piñera comentó a algunos parlamentarios de la Alianza por Chile -que agrupa a los derechistas Renovación Nacional (RN) y Unión Democrática Independiente (UDI)- que “su vínculo con el canal desaparecerá en las próximas semanas”.
También, desde el Palacio Presidencial de La Moneda, algunos funcionarios contactaron a legisladores oficialistas para darles a conocer la decisión.
Según la prensa, el canal de televisión Chilevisión, el segundo más importante del país después de la estatal Televisión Nacional (TVN), está avaluado en 160 millones de dólares.
De acuerdo con La Tercera, un conglomerado mexicano, otro español y uno argentino están interesados en comprar el canal.
La intención inicial del mandatario era entregar el canal a una fundación administrada por su familia, pero sus opositores lo acusaron de incurrir en conflicto de interés, pues entre sus obligaciones como mandatario nombró al presidente del directorio de la estatal TVN, con la que Chilevisión compite.
Sus aliados también le pidieron vender y terminar con el problema. “Sería más conveniente una venta”, dijo el senador UDI Jovino Novoa, mientras que el parlamentario de la UDI Víctor Pérez recomendó al mandatario “terminar con este debate evitable e innecesario”.
“Queremos un presidente al mil por ciento y no pensando en Chilevisión”, señaló por su parte el senador independiente Carlos Bianchi.
Piñera, un multimillonario empresario de derecha, cuya fortuna es calculada en 2.200 millones de dólares según la revista Forbes, se deshizo a fines de marzo de las acciones de la aerolínea LAN que poseía, a un precio de 1.500 millones de dólares. El retraso en venderlas le significó severas críticas de la oposición.