El controvertido actor Sean Penn, que estuvo casado con la cantante Madonna de 1985 a 1989, acudió al concierto que la estrella dio en el Staples Center de Los Ángeles a principios de mes y según testigos vieron que entre la expareja existe todavía una gran química.
“Tenían una química tremenda. Madonna parecía estar actuando solo para Sean. Y él decía cosas como: ‘increíble’ y ‘está muy buena’”, contó una fuente.
A pesar del estrecho lazo entre los dos, personas cercanas a la cantante aseguran que la pareja nunca volverá a estar junta porque Madonna prefiere estar con personas a las que “pueda controlar”.
“Son buenos amigos. Pero los dos tienen mucho carácter. Ella solo puede estar con alguien a quien controle. Los amigos de Madonna desearían que volviera con Sean. Él siempre será el amor de su vida”, explicó a la revista Us Weekly.
La artista estadounidense coqueteó con su audiencia, aunque el receptor de las insinuaciones parecía ser su expareja.