“¿Qué te parece ir de camping con Kate y sus ocho hijos — ese programa de TV que ves?”, le pregunta Palin a su hija Piper al comienzo del episodio.
Piper reacciona encantada con la idea de pasar un rato con las estrellas de la serie de TLC.
El paseo en los bosques de Alaska no equivale a un día de playa para Kate, pero resulta en una hora divertidísima para el programa de Palin, que se transmite el domingo por TLC a las 9 p.m. hora del este.
No siga leyendo si no quiere que le arruinemos la sorpresa.
Por pocos momentos, Kate parece disfrutar su visita a los Palin. De inmediato se lleva bien con Sarah, con quien comparte opiniones sobre la naturaleza depredadora de los medios de comunicación.
“No conozco mucha gente que pueda entender el escrutinio de los medios“, dijo Kate, cuya separación de su esposo Jon fue documentada en “Jon & Kate Plus 8″ y alimentó el hambre de chismes de los tabloides.
Ahora una madre soltera, Kate y sus hijos por casualidad estaban en Alaska grabando uno de sus especiales de “Kate Plus 8″, y ello derivó en su participación en el programa de Palin.
La primera parada del paseo: Sarah lleva a Kate a una clase de seguridad ante los osos para prepararse para su expedición.
En el camino de Wasilla a la clase en Anchorage, Sarah bromea diciendo que en caso de un ataque de oso lo que uno necesita es “un compañero más lento que uno”.
“¡Ay, Dios mío!”, responde Kate, quien ya se había asustado con la alfombra de piel de oso que vio en la casa de los Palin. “¿Sacrificar a tus amigos?”
En el campo de tiro la mujer luce más miserable de lo que solía con su marido.
Y ese es sólo el principio.
El día de su paseo les cae un aguacero.
En medio de la nada, junto a un arroyo y rodeados sólo por montañas, Sarah está sonriendo, contenta, (literalmente) armada para enfrentar a un oso.
“Llueva o relampaguee, los alaskeños salimos de campamento”, dice Palin alegremente. “Siempre encontramos la manera de divertirnos”.