Así lo dio a conocer el diputado Richard Blanco (ABP – Distrito Capital), quien en nombre de la Unidad consideró que las cárceles deben ser descentralizadas y dirigidas por profesionales: “Nuestros centros de reclusión, lejos de ser lugares que propicien la reinserción social del interno, son actualmente verdaderas escuelas de criminales”.
Blanco, quien además es miembro de la Comisión de Cultos y Régimen Penitenciario de la Asamblea Nacional, lamentó que la nueva ministra sea más conocida “por sus actuaciones políticas que penitenciarias”, y la exhortó a darle cumplimiento al artículo 272 de la Constitución, el cual consideró letra muerta.
El diputado de la Unidad reiteró que los recintos penitenciarios venezolanos se han convertido en los últimos años en los más inhumanos y violentos del continente.
“En 34 cárceles con capacidad para albergar a 12.500 personas, se encuentran hoy confinados más de 48.000 reclusos, lo que se traduce en un hacinamiento cercano a 375%. Aproximadamente, 70% de los detenidos se encuentran siendo procesados sin haber obtenido una sentencia definitivamente firme. Los traslados a tribunales nunca se realizan, produciéndose un gigantesco retardo procesal. Durante el ejercicio de este Gobierno, han fallecido más de 4.500 reclusos”, denunció.
Aseguró que la reciente crisis ocurrida en la cárcel de El Rodeo puso en evidencia que el Estado ha perdido el control de los penales, y que bandas internas de delincuencia organizada son las que verdaderamente ejercen el poder.