El vicepresidente de la República, Ramón Carrizález, explicó los acuerdos entre las partes que flexibilizan la medida dictada a fines de diciembre. Aseguró que fuera del horario autorizado de 11:00 a.m. a 9:00 p.m. para los centros comerciales “hay actividades que se mantienen en sus horarios (más allá de las 9:00 p.m. o antes de las 11:00 a.m.) porque son de bajo consumo, y aquí se engloban servicios de salud, recreación (cines y teatros, entre otros), bancos, supermercados, centros educativos y estacionamientos; servicios que usan gran cantidad de personas, pero que no afectan la política de reducir el consumo en los centros comerciales”.
Este sector entregó a la Vicepresidencia un reporte donde se detalla que las medidas de ahorro energético ejecutadas desde octubre de 2009 se han traducido en una reducción superior a 20% en el consumo eléctrico de los centros comerciales, lo que dejaría un balance en la demanda que hace factible la operación de comercios como cines o restaurantes, dijo Carrizález.
José Francisco Mata, vicepresidente de la Cámara de Centros Comerciales, dijo que fuera del horario estipulado el consumo de los “malls”, aun con la operación de negocios como cines y restaurantes, se reduce entre 50 y 80%, en promedio.
Además, se estarían considerando medidas adicionales como la instalación de paneles solares para generar energía para avisos y vallas luminosas en las plazas comerciales.
Lo que viene Carrizález aseguró que “se aclararon todos los puntos (de la resolución) que han sido utilizados para descalificar las medidas lógicas y racionales, tomadas por el Gobierno, en función de una situación particular por el fenómeno climático El Niño”.
Afirmó que estas medidas de ahorro y reducción de la demanda de energía “deben transformarse en estructurales para reducir el derroche y el consumo”. Por ello, el Ejecutivo seguirá buscando fórmulas para bajar el consumo eléctrico y para que las industrias y empresas generen su propia electricidad.
Dijo que el Gobierno asumió su parte de ahorro al paralizar las líneas I y II de Alcasa “no por la situación eléctrica, sino por recomendación”, a lo que agregó que los trabajadores de las empresas de Guayana no deben temer incumplimiento de compromisos laborales.
Sin embargo, aún faltan al menos 5 meses para que empiecen las lluvias del invierno. Y por ello, las medidas del Gobierno apuntan a “tratar de que el lago de Guri se vacíe en 5 meses y no en 2 meses” como ocurriría sin el ahorro ordenado por el Gobierno, explicó el ministro de Energía Eléctrica, Ángel Rodríguez, quien agregó que sería irresponsable seguir generando electricidad desde Guri en la misma escala. “Si nosotros no ahorramos agua, olvídate de actividad productiva y de desarrollo económico. Lo que estamos haciendo es tratar de ahorrar”.
Detalló que “estamos tratando de que se vacíe Guri lo más lento posible. Si la sequía se profundiza durante 7 u 8 meses tendríamos que afincar las medidas porque no podemos dejar al país sin electricidad”.
El Universal