¿Algunos ejemplos? He aquí unos cuantos:
INFUSIONES Y DECOCCIONES
Las infusiones se hacen dejando las hojas y frutas unos minutos en agua caliente antes de tomarlas, mientras que las decocciones se hacen dejando hervir las raíces, semillas, frutas o tallos en agua durante unos minutos.
– Infusión de salvia con miel: suaviza la garganta irritada.
– Infusión de hierbaluisa: resulta perfecta para las digestiones pesadas.
– Infusión de manzanilla, melisa y tomillo: al igual que la anterior, resulta también ideal para hacer más ‘llevadera’ una mala digestión.
– Decocción de tomillo y raíz de jengibre: una rama de tomillo y un trozo de jengibre de dos o tres centímetros harán de un constipado algo menos molesto.
– Té verde: en infusión, ayuda a adelgazar, mejora el metabolismo de las grasas, es antiinflamatorio y disminuye el colesterol malo, entre muchas otras cualidades.
PARA ENTONARSE EN UN RESFRIADO
Ingredientes:
Raíz de jengibre, canela en rama, pimienta de Jamaica, corteza de naranja, zumo de naranja, ½ manzana Reineta, miel, ron (opcional).
Elaboración:
Dejar cocer el jengibre ligeramente machacado con la canela, la pimienta de Jamaica, la corteza de naranja y la manzana. Cocer durante unos 7 minutos, servir en un vaso con el zumo de naranja, miel y un poco de ron.
Variante 1: añadir a la cocción una mandarina partida por la mitad.
Variante 2: una infusión o té, a la que se añade zumo de naranja o limón, miel y jengibre rallado.
OTRAS IDEAS ‘RECONFORNTANTES’
– Caldo de pollo con una rama de tomillo
Cuando se está acatarrado resulta perfecta, al igual que una sopa de ajo, también con tomillo.
– Caldo de pescado y jengibre rallado
Se puede añadir una pizca de guindilla y gambas crudas al caldo hirviendo. Ideal como aperitivo para entrar en calor.
– Caldo de alcachofas y cardo con cebolla.
Este caldo depurativo funciona a las mil maravillas para una mañana de resaca.