En unas pocas semanas, el periodista Mark Ward ha conseguido elaborar una pieza de spyware, con la asesoría de Chris Wysopal, un experto de la compañía de seguridad Veracode. Una vez instalado en el móvil, el spyware resultante es capaz de trabajar en un segundo plano, sin despertar sospechas, y de recopilar toda la información existente en el teléfono, incluyendo la agenda de contactos y los mensajes de texto, así como los datos de localización del dispositivo, para luego enviarlo todo a una dirección de correo electrónico.
Este experimento de laboratorio, donde el spyware solamente se ha instalado en un teléfono móvil, prueba una vez más lo que todos los expertos en seguridad saben: los dispositivos móviles son vulnerables a la acción de todo tipo de malware. La intención del reportaje, según su autor, Mark Ward, es transmitir a los usuarios de teléfonos móviles que deben tener mucho cuidado con todo aquello que instalan en su smartphone, porque puede presentar tantos riesgos como hacerlo en un ordenador. Actualmente, algunos ciberdelincuentes están comenzando a prestar atención a los teléfonos móviles como objetivo de sus fechorías.
La difusión de este reportaje de la BBC ha coincidido con la detección del primer troyano específico para la plataforma Android, que acaba de efectuar la empresa de seguridad Kaspersky; el objetivo de este troyano es enviar a escondidas del usuario mensajes de texto a un número de teléfono premium, con la consiguiente sobrecarga de la factura del móvil.
Vía BBC