Isner, campeón este año en Auckland y finalista en Memphis y Belgrado, ciudad desde la que se trasladó a Madrid en tren, con 14 horas de viaje, hizo todo lo que pudo contra el jugador que más victorias lleva este año en tierra batida, pero no fue suficiente.
Con el techo cerrado de la pista Manolo Santana, algo que favorecía al de Tampa, el fuerte servicio del americano, que promedia 20 ‘aces’ en cada encuentro, apenas inquietó a Nadal, que tras romper en el undécimo juego, a los 39 minutos, controló luego con tranquilidad.
Una nueva rotura en el tercer juego del segundo set terminó por destrozar la moral de Isner, que acabó lanzando su raqueta al suelo y bajando los brazos después de una hora y 27 minutos, tras encajar el primer ‘ace’ de Nadal, con el que el español selló su triunfo.
Isner solo pudo lograr 11 directos, muy poco ante el mejor resto de Nadal, que lleva ya dos victorias sin ceder un set y que se enfrentará en cuartos al ganador del encuentro entre el español Guillermo García López y el francés Gael Monfils, duodécimo favorito.e