La dirección del club informó en su web oficial que el técnico madrileño abandonó su puesto “de mutuo acuerdo” tras una temporada en la que esta formación concluyó en séptimo puesto de la Premier y no se clasificó para la Liga de Campeones, reseñó Efe.
La junta directiva de Anfield pidió a su director gerente, Christian Purslow, que con la ayuda del embajador de la entidad, el escocés Kenny Dalglish, inicien la búsqueda para “identificar” y “valorar” a “posibles candidatos” para llenar la vacante dejada por el español.
El club señaló que no se ha fijado un plazo para realizar este proceso y el Liverpool apuntó que no emitirá futuros comunicados hasta que nombre a un nuevo técnico.
“Rafa será siempre parte de la historia del Liverpool por haber devuelto a casa la Liga de Campeones tras una final épica en Estambul, pero después de una temporada decepcionante, ambas partes consideraron que un nuevo comienzo sería lo mejor para todos los implicados”, explicó el presidente del equipo, Martin Broughton.
Por su parte, el entrenador admitió su “tristeza” ante esa decisión: “Para mí es muy triste anunciar que ya no seré entrenador del Liverpool. Me gustaría agradecer el esfuerzo de los jugadores y del personal técnico”.
“Siempre llevaré en mi corazón los buenos tiempos que pasé aquí, el apoyo sólido y leal de los aficionados en las épocas difíciles y el cariño del Liverpool”, dijo Benítez.
“No tengo palabras para agradecer lo suficiente estos años y estoy muy orgulloso de poder decir que he sido su entrenador”, añadió el ya ex técnico “red”.
El madrileño concluyó su despedida con la mítica frase que acompaña a este club: “Nunca caminaréis solos”.
Según informó anteriormente la cadena británica BBC, la entidad podría haber ofrecido al técnico una cifra multimillonaria para que abandonara el club de forma inmediata, tras seis años al frente del conjunto.
El pasado marzo, Benítez firmó un contrato por cinco temporadas más pero no logró, durante esta campaña, cumplir con las expectativas depositadas en su plantilla, que no se clasificó para competir en la Liga de Campeones y quedó en séptimo lugar de la Liga.
El Liverpool atraviesa momentos complicados ya que tiene una deuda cifrada en 351 millones de libras (unos 419,3 millones de euros) y ha sido puesto a la venta este año por sus propietarios, los estadounidenses Tom Hicks y George Gillett.
Precisamente, la gestión hecha por los dueños actuales ha generado numerosas protestas por parte de la hinchada “red”, descontenta con la forma en que los americanos organizan el club.
La marcha de Benítez plantea nuevos interrogantes sobre el futuro de varios de los jugadores considerados “clave” del equipo.
Entre ellos se encuentra el capitán del club, el centrocampista inglés Steven Gerrard, el delantero español Fernando Torres y el medio argentino Javier Mascherano, cuyos nombres se han vinculado recientemente con posibles traspasos a otros clubes.
En cuanto a la supuesta oferta hecha para concretar la salida del madrileño de Anfield, la BBC habla de una cantidad “significativamente superior a los 3 millones de libras (4,4 millones de dólares) de los que han hablado los medios”.
El entrenador de los “reds” “tiene derecho a 16 millones de libras (unos 19 millones de euros) como resultado del contrato que firmó el año pasado”, de acuerdo con esa cadena.
Benítez asumió las riendas de la plantilla en junio de 2004, cuando reemplazó al francés Gerard Houllier y se ganó a la afición local al conquistar la Liga de Campeones en 2005.