El defensor del Barcelona igualó a los 79 minutos con un toque de derecha dentro del área, después de que Sudáfrica pegara primero a los 55′ con un golazo de Siphiwe Tshabalala en un estadio Soccer City colmado con casi 85.000 espectadores.
Katlego Mphela estrelló un remate en el palo a dos minutos del final que hubiera dejado al “Tricolor” con las manos vacías y a los “Bafana Bafana” con un impactante triunfo en la inauguración del primer Mundial de la historia en el continente africano.
Pero los hinchas locales, que alentaron durante todo el partido a los suyos con el ensordecedor ruido de las vuvuzelas (trompetas tradicionales), debieron resignarse al reparto de puntos.
El 1-1 final deja a los dos en un lugar delicado en un Grupo A, que está integrado también por Uruguay y Francia y en el que se presagia una reñida lucha por los boletos a octavos de final.
México estuvo más cerca en el primer tiempo, pero su anemia crónica de gol no le permitió irse al vestuario con una sonrisa. Y para peor, el árbitro uzbeko Ravshan Irmatov anuló a instancia de su colaborador un gol a Carlos Vela por offside tras un córner.
El “Tri” había sido un vendaval en el arranque. A los dos minutos un defensor sacó al córner in extremis cuando Giovani Dos Santos se aprestaba a sentenciar.
El equipo de Javier Aguirre entraba por la banda derecha como si fuera el living de la casa y los encuentros Paul Aguilar-Dos Santos, primero, y Vela-Guillermo Franco generaban peligro real.
Esas pequeñas sociedades por poco dieron fruto. Otra vez un defensor frustró a Dos Santos, Vela remató afuera y la más clara de ese primer tiempo la tuvo Franco en su botín derecho pero el brazo del portero Itumeleng Khune frustró el ansiado grito, a los 32′.
Aguirre dispuso de tres volantes de marca en el medio –con Rafa Márquez como central– y Sudáfrica, con un único delantero neto y claramente parado para el contrataque, no encontraba el balón.
Sin embargo, hubo momentos en que Steven Pienaar y Tshbalala se encontraron y encabezaron avances rápidos y potentes –casi como si se tratara de un movimiento de rugby– y sembraron alguna inquietud en el fondo de México, a veces dubitativo.
Unos milímetros evitaron que sobre el final del primer tiempo Mphela impactara de cabeza casi dentro del área chica para romper el cero.
Fue el preanuncio de lo que vendría: Parreira tiró el equipo más arriba en la segunda etapa y ganó en agresividad. Un nuevo contraataque tomó muy mal parada a la defensa mexicana y Tshabalala superó en velocidad a Ricardo Osorio y sacó un garrotazo cruzado de zurda que se metió en el segundo palo de un Pérez a cuyo brazo le faltaron unos centímetros para despejar.
El 1-0 golpeó el alma de México y Andrés Guardado saltó desde el banco en lugar de un defensor para aportar algo de creación. A veinte del final fue el turno del ingreso del legendario Cuauhtémoc Blanco por el desaparecido Vela, y poco después el de Javier “Chicharito” Hernández en reemplazo del “desconocido” Franco.
Los cambios terminaron pagándole un buen dividendo a Aguirre. Porque Sudáfrica le tuvo piedad y no sentenció cuando podía. Y fue ingenuo para tirar mal la trampa del offside ante un pelotazo en forma de centro desde la izquierda en el que tres mexicanos quedaron solos ante el arquero.
El tercero en llegar era Márquez, quien demostró toda su experiencia para acomodar el balón y tocar al primer palo.
Así México respiró, aunque deberá mejorar si quiere cumplir su sueño de mínima en este Mundial: alcanzar sus anhelados cuartos de final mundialistas por primera vez fuera de casa.
Síntesis:
Sudáfrica: Khune – Gaxa, Mokoena, Khumalo, Thwala (’46 Masilela) – Letsholonyane, Dikgacoi – Modise, Pienaar (’83 Parker), Tshabalala – Mphela
México: Pérez – Osorio, Rodríguez, Márquez, Salcido – Torrado, Aguilar (’55 Guardado), Juárez – Dos Santos, Franco (’73 Hernández), Vela (’69 Blanco).
Espectadores: 84.490, lleno
Goles: 1-0 Tshabalala (’55). 1-1 Márquez (’79)
Árbitro: Irmatow (Uzbekistán)
Tarjetas amarillas: Dikgacoi y Masilela / Juárez y Torrado.
ASI JUGÓ SUDAFRICA
Itumeleng Khune: Vendido en el gol de Márquez, cuajó sin embargo un excelente partido, con dos intervenciones de mucho mérito que bien hubieran podido haber cambiado el signo del partido.
Sibosio Gaxa: Muy atento toda la tarde, cerró a la perfección su banda durante la primera parte y menos durante la segunda. Muy centrado en tareas defensivas, por lo que se incorporó poco al ataque.
Aaron Mokoena: Expeditivo en el corte, capitaneó bien la defensa y sufrió para atar a Franco. En su debe, la elección que tomó en el balón colgado que supuso el empate de México.
Katlego Mphela: Se fajó durante los 90 minutos con la defensa mexicana buscando el error. Su empeño le dio un par de ocasiones que no supo concretar, la última un balón al palo al filo del final.
Steven Piennar: El más lúcido de los sudafricanos, ocupó una gran parcela del campo,ofreciéndose siempre para dar sentido coral al juego de su equipo. Recorrió muchos kilómetros y salió del campo agotado a diez minutos del final.
Teko Modise: Discreto en la primera parte, se mostró incansable en la segunda, tanto en la recuperación en las cercanías de su área como en la creación en las de la contraria para cerrar un partido notable.
Reneilwe Letsholonyane: Con Dikgacoi forma una pareja muy interesante en el centro del campo. Barrió la zona ancha con un gran desgaste físico y siempre encontró cómo hacer llegar la pelota a los pies más lúcidos de su equipo.
Kagisho Dikgacoi: Correcto en la primera mitad, mejoró con el paso de los minutos, como casi todo el equipo. Se incorporó con ambición al ataque en las jugadas a balón parado. Dispuso de un buen remate de cabeza que lanzó fuera.
Lucas Thwala: El más gris entre los sudafricanos. Nervioso y desacertado, llegó tarde con demasiada frecuencia. Su banda fue una mina para México en los primeros veinte minutos. Aunque mejoró con el tiempo fue sustituido en el descanso por Masilela.
Bongani Khumalo: Jugador bisoño de prometedora trayectoria, pareció acusar en exceso la carga emocional del partido. Errático en la salida del balón sí supo al menos como cerrar espacios a los puntas mexicanos.
Tsepo Masilela: Su entrada le complicó las cosas a México y le dio un nuevo aire a Sudáfrica, más arropada y mejor posicionada para salir a la costra. Su agresividad le costó una amarilla.
Bernard Parker: Sustituyó a un Pienaar agotado y dispuso de cinco minutos en los que consiguió meter un centro al área.
ASI JUGÓ MEXICO
Óscar Pérez: apenas le crearon ocasiones de gol y nada pudo hacer en el tanto que le marcaron, aunque pudo haber recibido el segundo en una indecisión al final del encuentro.
Paul Aguilar: Jugó 55 minutos y su rendimiento fue de más a menos, con buenas penetraciones en las primeras acciones del partido.
Ricardo Osorio: cumplió en defensa y trató de ser ofensivo cuando pasó al lateral en el segundo tiempo tras la salida de Paul Aguilar.
Francisco Rodríguez: estuvo bien en defensa y en ataque, sobre todo en el juego aéreo en acciones a balón parado, aunque en alguna acción se mostró algo confiado.
Rafael Márquez: dio equilibrio a la defensa y al centro del campo de su equipo y estableció el gol de la igualada cuando su selección atravesaba su peor momento del encuentro.
Carlos Salcido: cumplió en defensa, aunque se limitó a despejar balones y tuvo poca aportación ofensiva, salvo en los minutos finales en los que se sumó más al ataque.
Gerardo Torrado: dio equilibrio al equipo y demostró capacidad de recuperación sin cometer muchas faltas y siempre trató de convertirse en un apoyo para el compañero.
Efraín Juárez: pese a verse condicionado por la tarjeta que vio al principio del encuentro, realizó un trabajo incansable de recuperación de balón y aportación ofensiva.
Giovanni Dos Santos: fue el jugador que más se dejó ver del ataque mexicano, con movilidad, toque de pelota y una muy buena ocasión para empatar el encuentro.
Carlos Vela: le fue anulado un gol por fuera de juego en el primer periodo y fue sustituido a mitad del segundo tras haber participado en dos de las mejores acciones ofensivas de su equipo.
Guille Franco: dispuso de dos claras ocasiones de gol en sendos cabezazos y otra con el pecho, todas ellas en el primer tiempo.
Andrés Guardado: entró tras el 1-0 para dar más mordiente al ataque mexicano y dio el centro del gol del empate de su selección. Su aportación fue destacada.
Cuauhtemoc Blanco: demostró su personalidad futbolística en los minutos que estuvo sobre el terreno de juego y se dejó notar en el campo.
Javier Hernández: apenas dispuso de minutos, aunque se mostró batallador en el poco tiempo de que dispuso en el tramo final del choque