Científicos australianos han desmentido la existencia de la relación entre el uso de móviles y el cáncer cerebral.
Un equipo de científicos de la Universidad de Sídney (Australia) ha investigado la popular hipótesis de la existencia de cierta relación entre el cáncer cerebral y el uso de móviles. En ese sentido, no han encontrado ninguna asociación entre estos dispositivos y el desarrollo de la enfermedad.
Para el estudio, publicado en la revista ‘Cancer Epidemiology’, los científicos procesaron los datos sobre los casos de cáncer registrados en Australia desde 1982 hasta 2012. En ese período, la enfermedad fue diagnosticada en 19.858 hombres y 14.222 mujeres. También analizaron el uso de celulares en el país desde 1987 hasta 2012, que ahora constituye un 90% entre la población.
Los científicos dividieron todos los casos de cáncer en diferentes grupos según la edad (20-39 años, 40-59 años, 60-69 años y 70-84 años), tomando en consideración el nivel de riesgo del desarrollo de la enfermedad con un índice de 1,5 en los que usan móviles y 2,5 en los que usan móviles muy a menudo (un 19% de todos los usuarios).
Los resultados mostraron que el número de casos de cáncer a lo largo de 30 años se mantenía constante. Un incremento se observó solamente entre los que tenían más de 70 años, pero los científicos niegan la conexión con los celulares debido a que el incremento comenzó en 1982, antes de la extensión del uso de estos dispositivos en el país. Una mayor detección de casos a principios de 1980 podría deberse a los avances tecnológicos, como la aparición de la tomografía computada.