El vicepresidente de Fontur, Júpiter Calderón, informó que la construcción del primer tramo lleva más de 60% de avance, y que desde hace tres meses tienen 10 frentes de trabajo activos. «Fue una exigencia del ministro de Transporte y Comunicaciones que aceleráramos los trabajos, por eso hemos incrementado los horarios y turnos nocturnos», detalló.
Los frentes, según se vio en un recorrido, están entre las esquinas San Miguel a San Enrique, donde una de las estaciones está casi lista, entre Socorro y San Ramón (construcción de otra estación), en el puente de las Fuerzas Armadas, en La Hoyada (hacen una estación), en la esquina El Cristo (otra estación e instalan servicios en las aceras) y en Roca Tarpeya (remodelan aceras, hacen el corredor central y una pantalla atirantada).
La primera etapa llegará hasta este punto, y la segunda irá de Roca Tarpeya a Los Ilustres, por toda la avenida Nueva Granada. Calderón informó también que los autobuses se están «adquiriendo» y que serán a gas. «Este año, con toda seguridad, estará la primera etapa», reiteró, y asomó la posibilidad de que sea en el primer semestre de este año.
Cierre y caos. Desde ayer en la tarde y hasta el viernes estará cerrado el paso de vehículos entre las esquinas Socorro a San Ramón, sentido sur-norte, de la Av. Fuerzas Armadas. El vicepresidente de Fontur indicó que la medida obedece a la construcción del corredor vial del BusCaracas en ese tramo, y que el cierre será completo, día y noche,. Los carros serán desviados a la derecha al bajar del puente de las Fuerzas Armadas.
Los distintos frentes de trabajo complican el tráfico a lo largo de la vía. En Roca Tarpeya la construcción del muro de contención y arreglo de las aceras causa fuertes colas en las mañanas, sobre todo cuando se hace una especie de contraflujo sin previo aviso.
El La Hoyada el embudo de las obras de la estación obliga a detenerse por varios minutos, mientras que en las esquinas Socorro (sentido norte) y San Ramón (sentido Sur), tanto choferes como peatones se vuelven un ocho cruzando en las intersecciones. A esto se suma el mal estado de la vía, que ahora está escarificada.