Presidente de PDVSA: Ninguna empresa paralizará las actividades petroleras de Venezuela

   Un año tenía cerrada la empresa H&P en Anaco por decisión arbitraria de anteriores dueños / Rafael Ramírez agradeció a los trabajadores y pueblo de Anaco por haber resguardado las instalaciones / Personal pasará a la nómina de PDVSA / El Estado venezolano será garante de que se cumpla lo establecido en la Constitución y leyes

Calificando la nacionalización de la empresa de taladros Helmerich & Payne de Venezuela, C.A. (H&P) como una medida justa con los trabajadores y el pueblo, el Ministro del Poder Popular para la Energía y Petróleo, y Presidente de Petróleos de Venezuela (PDVSA), Rafael Ramírez, advirtió que ninguna empresa o persona puede paralizar las actividades fundamentales de la economía nacional, y en especial la principal industria venezolana.

Desde Anaco, estado Anzoátegui, y agradeciendo la presencia de cientos de trabajadores petroleros y habitantes del sector que estaban concentrados a lo largo de todo el día en las instalaciones de la empresa norteamericana, el alto funcionario venezolano aseveró que el Estado Bolivariano se apoya en las leyes y la constitución para tomar control absoluto de los 11 taladros necesarios para la producción nacional, pero que estaban inutilizados por decisión arbitraria de directivos extranjeros.

El decreto presidencial se publicó este jueves, luego que la Asamblea Nacional decidió declarar la utilidad pública estos taladros arbitrariamente inutilizados por la empresa extranjera.

«Es conocido que esta empresa, sujeta a la acción de expropiación, tiene un año cerrada sus operaciones. Estos señores inversionistas extranjeros sencillamente decidieron, sencillamente prefirieron, antes que acordar operaciones con nuestra industria, cerrar las instalaciones y paralizar los 11 taladros que necesitamos», resumió, al recordar que por muchos años la firma extranjera prestó servicio y acumuló su riqueza a costa de los recursos nacionales, para luego abandonar a su suerte a los trabajadores y afectar gravemente los intereses de Venezuela.

Agradeció a los trabajadores su conducta revolucionaria y leal, y los alentó a seguir asumiendo el papel de vanguardia.

Informó que las instalaciones de la empresa ocupada son de los trabajadores, y los mismos se incorporan a la nómina de PDVSA con todos los derechos.

«Estamos garantizando que estos equipos, según nuestras leyes, pasarán a ser operados por PDVSA como empresa de todos los venezolanos y sus trabajadores, quienes desde hace un año han resguardo estas instalaciones y muchos han sido despedidos por esta empresa norteamericana, pasarán a PDVSA».

Rememoró que a consecuencia del sabotaje petrolero de 2002, luego del abortado golpe de estado de abril de ese año, el pueblo venezolano sufrió los rigores de una acción desestabilizadora que buscaba asfixiar económicamente a Venezuela atacando su principal industria. «Las actividades primarias de producción de petróleo tienen que ser continuas y nadie puede detenerlas por ninguna razón», sentenció Ramírez.

«Lo hemos dicho al pueblo y a los trabajadores: el Estado venezolano será garante de que se cumpla lo establecido en la Constitución y leyes…», afirmó.

«¡El Estado Revolucionario ha tomado el control de nuestra industria…en beneficio de nuestro pueblo y nadie nos detendrá en este propósito!», exclamó el ministro, siendo respaldado por la masa trabajadora que dijo presente.

«Hoy podemos afirmar categóricamente que el pueblo venezolano es dueño y propietario de su industria y el Estado Revolucionario está, ahora sí, colocando la renta petrolera, el producto de la explotación del petróleo, al servicio de nuestro pueblo y ha hecho una distribución Revolucionaria de la riqueza petrolera», puntualizó el ministro Ramírez

(VTV)