La firma francesa Biosantech y el científico Erwann Loret, del CNRS (Centro Nacional francés de Investigaciones Científicas) presentaron resultados preliminares que muestran en ciertos pacientes seropositivos una baja a nivel indetectable de las células infectadas por el VIH, tras la aplicación una vacuna curativa experimental.
«El resultado principal de este ensayo (…), es que tenemos un efecto con esta vacuna sobre las células infectadas por el VIH».
«Hacemos ganar 70 años de triterapia a los pacientes», dijo a la prensa en Marsella el doctor Erwann Loret, cuyos trabajos van a ser publicados en la revista científica Retrovirology.
Las triterapias, que permiten actualmente hacer indetectable en la sangre la carga viral –es decir el número de copias del virus–, no tienen efectos, o muy pocos, en el número de células infectadas, que sirven de reserva de virus y causan un aumento de la carga viral en cuanto cesa el tratamiento en la mayoría de los pacientes seropositivos.
En un ensayo clínico llevado a cabo en un hospital de Marsella con 48 pacientes repartidos en cuatro grupos (un grupo con placebo y tres con dosis diferentes de la vacuna), nueve pacientes tenían un nivel indetectable de células infectadas 12 meses después.
Preparada por el doctor Loret, la vacuna actúa contra la proteína Tat, producida por la célula infectada por el VIH y que impide a las defensas inmunitarias atacarla. La molécula de la vacuna fue denominada TAT Oyi, en referencia a un paciente gabonés resistente naturalmente al VIH, en el que se descubrió que esa proteína era capaz de generar una buena respuesta inmunitaria.
Una investigación más amplia podría llevarse a cabo próximamente en varios hospitales del mundo.