Los jóvenes se enfrentaron con funcionarios policiales y de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) resultando herido con impactos de perdigón en el brazo izquierdo, Gerardo Contreras, estudiante de la Universidad Católica del Táchira, quien fue trasladado a un centro de salud privado donde se encuentra fuera de peligro.
Mientras que los tres efectivos policiales resultaron heridos por los impactos de las piedras lanzadas.
En repetidas oportunidades los estudiantes fueron atacados por los uniformados con gases lacrimógenos y perdigones que fueron respondidos con piedras.
Estos acontecimientos se iniciaron desde las 3:00 p.m. aproximadamente y por segundo día consecutivo, en donde supuestos estudiantes de este recinto universitario salieron a las calles a protestar en contra del racionamiento de energía eléctrica y para exigir justicia por la muerte del estudiante Jesús Eduardo Bello, fallecido en diciembre durante una protesta.
Actividades suspendidas
Las actividades académicas tanto de pregrado como de posgrado fueron suspendidas.
El profesor Alfonso Sánchez, Vicerrector-Decano de la institución dijo que esta decisión fue tomada en virtud de que se han presentado una serie de actos que perturban el normal desenvolvimiento de las rutinas académicas.
Recordó que “el lunes aproximadamente a las siete y media de la noche previa conversaciones con el Coronel Espinel de la GNB se logró consensuar la calma por parte de las personas que se encontraban en las inmediaciones de la universidad protestando”.
Explico que durante todo el martes, se hizo monitoreo del escenario y se esperaba que continuara en calma al recinto universitario. Sin embargo, en la tarde se presentó el conato de violencia.
El Universal