Esto quizás puede hacerse realidad en la final del torneo que arranca el lunes, algo que hasta hace unos cuantos meses parecía medio antojadizo.
Con el permiso de Novak Djokovic y Andy Murray, Nadal y Federer son los dos grandes favoritos. Y Juan Martín Del Potro, el último campeón, no podrá defender el título luego que no logró recuperarse a tiempo de una operación en la muñeca derecha.
Después de ganar en enero el Abierto de Australia, Federer se despidió en los cuartos de final del Abierto de Francia y Wimbledon. Una racha de 23 semifinales consecutivas en los Slams quedó guardada en los archivos. Descendió al tercer lugar del ranking mundial, el puesto más bajo del suizo desde noviembre de 2003.
Casado y padre de un par de mellizas, la motivación de Federer estaba en duda.
Pero el título que consiguió la semana pasada en el Masters de Cincinnati, su primero de Australia, despertó la ilusión de que Federer y Nadal podrán hacer realidad un duelo por la corona de Flushing Meadows.
La rivalidad persiste, aunque como tal no tiene nada de belicosa. Ambos aparecen en un video viral riéndose sin reparo durante cinco minutos durante la grabación de un anuncio para promover un partido benéfico que Federer prepara a fin de año en Suiza. Y ambos estuvieron juntos esta semana como parte de una exhibición en Nueva York.
El último cruce de ambos en una final de un Slam se remonta a la de Australia en enero de 2009, la misma en la que Nadal hizo llorar a Federer. Los más recientes fueron en la arcilla de Madrid, con Nadal imponiéndose en mayo de este año.
“Depende donde te toque enfrentarle”, dijo Federer tras su victoria en Cincinnati. “Desafortunadamente, rara vez podemos jugar acá en Estados Unidos, donde las condiciones me favorecen un poco más”.
“Creo que nos entusiasmamos cuando nos toca enfrentarnos mutuamente, pero no es que lo echamos de menos”, añadió. “Hemos tenido tantos partidos y son partidos duros y extenuantes para ambos. Hay tanta expectativa en torno a los mismos, que te dejan algo exhausto a veces”.
Ambos llegan con ambiciones a la cita de Nueva York
Mientras que Federer va por su 17mo grande, Nadal quiere convertirse en el séptimo hombre que completa el Grand Slam.
Se puede decir que Nadal se ha preparado y cuidado como nunca. Después que Del Potro le derrotó en las semifinales del año pasado, el número uno del mundo confesó que había terminado destruído físicamente.
En Nueva York, la barrera para el español han sido las semifinales, eliminado en esa instancias las dos últimas instancias. Con la mira puesto en el esquivo Slam que le falta, Nadal reguló su agenda de torneo, sólo los dos Masters norteamericanos, y totaliza apenas siete partidos desde su conquista en Wimbledon a principios de julio.
Sonó más aliviado que preocupado tras sucumbir ante Marcos Baghdatis en los cuartos de final de Cincinnati, como si la derrota le daba más tiempo para trabajar con sus tiros, sobre todo el revés.
“Tengo una semana para seguir practicando, y eso es lo que voy a hacer para aumentar mi confianza con el revés”, declaró Nadal.
Una final entre ambos podría ser entorpecida por gente como Murray, que se inyectó de moral con recientes victorias sobre Nadal y Federer en cemento. En procura de ser el primer británico en ganar un Slam desde 1936, Murray confía que la tercera se la vencida tras perder en las dos finales de los grandes que ha disputado, ambos ante Federer.
Sin Del Potro, la mejor carta latinoamericana es el también argentino David Nalbandian. Con marca de 11-2 en el último mes, incluyendo siete triunfos antes jugadores que figuran entre los 25 mejores del mundo, Nalbandian es un adversario peligroso para ser el 31er preclasificado y aparece como eventual rival de Nadal en cuartos de final.
El torneo femenino está mermado por las bajas por lesión de Serena Williams y Justine Henin, quienes entre las dos acumulan 20 títulos de Grand Slam.
Y problemas físicos han afectado a otras candidatas. La defensora del título Kim Clijsters se quejó de una molestia en la cadera, mientras que la resurgente Maria Sharapova se retiró de Montreal por una lesión en una pie.
Esto hace una lucha abierta por el título con una enorme posibilidad de que saldrá una nueva campeona en una lista que incluye a Caroline Wozniacki, Victoria Azarenka y Jelena Jankovic.
Vía AP