El jefe militar Mark Phillips indicó que con la compra de las naves de combate Guyana busca desarrollar su equipo de defensa aéreo. Indicó que la decisión final dependerá de un análisis de amenaza para el país
(Foto: Archivo)
Guyana analiza la posibilidad de adquirir nuevas naves de combate para su Fuerza Aérea de Defensa, según dijo hoy su jefe militar, Mark Phillips, como parte de un plan estratégico de cinco años que se le consultará al Gobierno.
En rueda de prensa este domingo, Phillips explicó que la decisión final para la adquisición del equipo militar dependerá de un análisis de amenaza para el país, que actualmente se encuentra en una disputa con Venezuela por la región del Esequibo y el río Cuyuni.
«El objetivo es, en una manera estructurada, en desarrollar nuestro equipo de defensa aéreo», dijo Phillips, al agregar que las propuestas han sido presentadas a la Junta de Defensa del país de la nueva administración gubernamental elegida en mayo pasado.
Phillips, quien rechazó decir si las Fuerzas de Defensa de Guyana estaban interesadas en comprar helicópteros militares como Surinam hizo de la India, indicó que según varios expertos en aviación, la construcción de un nuevo modelo de este tipo de aeronave costaría al menos 14 millones de dólares.
La tensión entre Venezuela y Guyana, en disputa por la región de Esequibo y el río Cuyuni, creció la semana pasada, lo que llevó a que el Gobierno venezolano preparara a cientos de sus soldados para un posible conflicto con su país vecino.
Phillips había subrayado anteriormente que sus soldados son entrenados para responder a cualquier agresión contra las fronteras de Guyana, lo que incluye supervisar y reportar de cualquier violación a la integridad territorial del país suramericano.
La disputa por la región de Esequibo está bajo mediación de la ONU desde la firma del Acuerdo de Ginebra en 1966, pero se agudizó después de que la compañía estadounidense Exxon Mobil descubriera en mayo pasado yacimientos de petróleo en aguas costeras de la zona en litigio.
El Gobierno de Venezuela respondió al hallazgo con un decreto que redistribuye al territorio venezolano en áreas conocidas como Zonas Operativas de Defensa Integral (Zodi) e incluye ese territorio marítimo en discusión.