“Estas medidas deben contribuir a lograr un control efectivo de lo que son esos instrumentos de muertes que se encuentran en nuestras calles y que generan tanta zozobra en la población”, señaló.
En este sentido, pidió “la colaboración de toda la sociedad, los comerciantes y empresarios para que logremos que efectivamente las medidas se cumplan“.
Fernández explicó que el registro que empezará a tomar vigencia a partir de enero “será un proceso de regularización para quien está irregular más no ilegal, es decir, sí tenía porte desde hace varios años, pero no lo ha renovado, se le va a dar un período de gracia de tres meses para poner sus papeles en orden”.
“La persona que tiene un arma legal, adquirida con un porte legal, no tiene ningún tipo de inconveniente, lo único que debe hacer es realizar un uso debido. Se recomienda no llevarla a la calle y tenerla en su hogar bajo un gran resguardo. Tener un arma conlleva una profunda responsabilidad y por eso hacemos un llamado de conciencia a la colectividad”, indicó.
Asimismo, resaltó que “las personas que porten armas en lugares prohibidos pasará por un proceso de decomiso, destruiremos el arma y se le revocará el permiso sin opción a obtener uno nuevo”.