El director de Hinterlaces, Óscar Schemel señaló, este lunes, un déficit en el mercado venezolano e informó: “Ha caído un poco la producción porque se expresa en esa caída en los niveles de abastecimiento, el estado venezolano debe de alguna manera estimular la producción”.
En julio, el índice general de abastecimiento marcó un 69.72 por ciento, es decir que “de los 42 rubros regulados por lo menos 30 no están disponibles”, reveló Schemel, e indicó que “el nivel de abastecimiento venezolano es del 70 por ciento cuando el ideal es el 95 por ciento”.
Entre el 30 por ciento de los productos que no están disponibles destacan: las carnes, harinas y la leche (el índice de abastecimiento en este rubro es de a penas 29 por ciento), informó Schemel.
Añadió que el nivel de abastecimiento del pollo registró una caída del 75 por ciento desde principios del año a Junio: “El pollo es la principal proteína que consumen los venezolanos, es el alimento de las mayorías, de los pobres (…) y ha caído un poco la producción porque se expresa en los niveles de abastecimiento. El estado venezolano debe de alguna manera estimular la producción”.
Schemel resaltó que el bachaqueo y el contrabando de extracción inciden en los niveles de abastecimiento: “Pero en el caso del pollo, tienen que ver con una caída importante de la producción, que sería bueno que el gobierno atendiera o evaluara e impulse; porque finalmente el índice de abastecimiento de los alimentos impacta en la posición política, en el comportamiento o decisión electoral”.
Aseveró que el índice de abastecimiento de los alimentos afecta sobretodo a los más pobres, a diferencia del índice de confianza del consumidor que impacta sobre la posición política y la intención de las clases medias populares.
El director de Hinterlaces explicó la metodología para medir la producción y la presencia de productos en los hogares y mercados. “El índice de abastecimiento del consumidor no mide los puntos de venta porque estos no llevan registros del mercado informal e inventarios en hogares, un conjunto de variables que hoy de alguna manera alteran el diagnóstico acerca de los niveles de abastecimiento” enfatizó.
En cuanto al índice de confianza del consumidor, un conjunto de variables que miden la expectativas de la capacidad de compra de artículos duraderos (línea blanca, línea marrón, viviendas, automóviles, así como posibilidades de ahorro y endeudamiento), “en Venezuela es de 28 puntos, en una escala de 200 puntos, cuyos valores por debajo de 100 son negativos”, resultados bajos según Schemel.
“Hay frustración. De alguna manera la adquisición y expectativas de adquisición de estos bienes refleja los niveles de bienestar y de alegría (…) Son bienes que tienen un impacto sobre la calidad de vida de las clases medias populares, pero se podrían tomar medidas, permitir la importación de autos, por ejemplo: hay un sector de la clase media que ha ahorrado en dólares pero hoy no tiene acceso a estos bienes”, agregó el director de Hinterlaces.