Sin embargo, el M28 en su cuenta en twitter @MovimientoM28, escribieron: «¡La rectora no esta secuestrada! ¡esto es una protesta pacifica!».
Las acciones en la UCV se iniciaron en la mañana cuando los obreros irrumpieron en la sesión del Consejo Universitario para exigir la dotación de uniformes y el pago de pasivos. El Secretario, Amalio Belmonte, indicó que solo cuentan con la mitad de los fondos, pues el Ejecutivo no ha enviado el resto, y que no es posible hacer las compra porque se estaría infringiendo la ley. «Cuando discutíamos ese punto ingresaron a la sesión y no se pudo continuar».
Los trabajadores cerraron los accesos y estacionaron dos autobuses en la plaza del rectorado. Más tarde, y bajo el grito «¡transformación universitaria!» un grupo de estudiantes del M28 llegó al salón de sesiones de la UCV y se mantuvo hasta horas de la noche. Posteriormente incendiaron el vehículo asignado a la Secretaría, y cortaron el servicio eléctrico.
Cuentas claras
Guillermo Guerrero, secretario de Reclamos del sindicato de obreros, denunció que pese a que hay dinero, las autoridades se niegan a pagar.
«Aquí no hay ningún secuestro, que investiguen, no tenemos miedo. Lo único que queremos es que conversen con nosotros, no somos terroristas ni violentos. Queremos que respondan a nuestras demandas y haya cuentas claras», señaló.
Por decisión de las autoridades, las clases fueron suspendidas hasta nuevo aviso.