Según la Casa Blanca, Chu le informó al mandatario estadounidense sobre los planes de BP por sellar el pozo en aguas profundas «y cuáles serán los siguientes pasos» si el nuevo intento, previsto inicialmente para mañana, fracasa.
Obama habló por teléfono con Chu desde el avión presidencial Air Force One, cuando se encontraba camino a California para una serie de actos políticos entre hoy y mañana.
Chu, que se encuentra en Houston (Texas), postergó su viaje a China esta semana, a petición de Obama, para continuar ayudando en los esfuerzos de respuesta del Gobierno al vertido de petróleo, una crisis que lleva más de un mes.
Por órdenes de Obama, el secretario de Energía encabeza un equipo de científicos que ha estado «escrudiñando» los planes de BP para frenar el vertido y ha aportado ideas para ayudar a la empresa a «maximizar las posibilidades del éxito», dijo la nota.
Según la Casa Blanca, BP está realizando pruebas de diagnóstico de presión clave antes de llevar a cabo otro intento por sellar el pozo de forma definitiva.
«El secretario Chu y su equipo están evaluando esos datos en tiempo real, en cuanto los reciben» y analizan también planes alternativos en caso de que fallen los nuevos esfuerzos de BP, agregó.
British Petroleum es la operadora de la plataforma petrolífera «Deepwater Horizon», que explotó el 20 de abril y se hundió dos días después desatando una catástrofe ecológica.
La empresa prevé inyectar fluido pesado y cemento en el pozo por el que manan cientos de miles de litros diarios pero afirmó hoy que podría retrasar o incluso abandonar esa operación.
BP, que ha sufrido pérdidas por casi 50.000 millones de dólares en su valor en el mercado, ha advertido que nunca se ha intentado una operación de ese tipo a 1.500 metros de profundidad.
A cinco semanas de la catástrofe, que ha suscitado fuertes críticas sobre cómo ha manejado la situación la Casa Blanca, Obama prevé realizar su segunda visita a las costas de Luisiana este viernes.
Sin ocultar su frustración ante los continuos fracasos de BP, Obama ordenó a sus asesores en días recientes que «sellen» el «agujero» en el fondo del Golfo de México.
Para controlar el daño a su imagen ante la crisis desatada, el Gobierno de Obama ha despachado a Chu y otros funcionarios de alto rango a supervisar las actividades de BP en la zona afectada.
«No estamos dependiendo de BP, pero necesitamos absolutamente de su pericia», dijo a la cadena por cable CNN, Carol Browner, la principal asesora de Obama en asuntos de energía y cambio climático.
La administradora de la Agencia de Protección Ambiental (EPA), Lisa Jackson, también ha concedido entrevistas en los principales medios de comunicación para transmitir los esfuerzos del Gobierno por atajar esta crisis.