Dijo que se trata de una decisión tomada por el presidente Hugo Chávez para ir en búsqueda de un equilibrio en cuanto al comportamiento del índice de precios de los bienes y servicios y para impulsar la producción interna.
Lo que se ha producido según el criterio de Sanguino es “un ajuste en la paridad cambiaria bolívar-dólar”.
Negó que esta medida se haya tomado para que el Gobierno obtenga más ingresos para financiar actividades políticas y ratificó que para el Gobierno de Chávez “lo principal es el ser humano”.
Señaló que en Venezuela más del 90 por ciento de los recursos en divisas los provee Cadivi y que quedaba un margen pequeño que se transaba en el mercado no oficial.
El Gobierno, según dijo Sanguino, “irá en búsqueda de un equilibrio y no debe producirse especulación en el precio de los productos”. Agregó que “el remarcaje está prohibido por la ley y quienes especulen serán sujetos a sanciones”.
“No estamos tomando una decisión para favorecer a determinados grupos económicos, sino para favorecer y defender a las grandes mayorías”, destacó.
Tal como lo expresó el diputado a la Asamblea Nacional, “la decisión no se tomó como consecuencia de que el presupuesto público no puede ser financiado, se tomó porque los presupuestos adicionales que se van a obtener, van a servir para actividades productivas orientadas a la exportación”.
“Estamos impulsando la participación de Venezuela en el Mercosur, estamos impulsando la ALBA, la participación de Venezuela en el Mercado del Caribe”, añadió Sanguino.
Explicó que habrá otro fondo que será utilizado para impulsar actividades productivas orientadas a sustituir importaciones.