Jesús Chúo Torrealba advirtió, en exclusiva para el Clarín de Argentina, que el régimen se ha endurecido, porque pateó el diálogo que mediaba el Vaticano y que ahora podrían intentar un golpe palaciego al estilo «fujimorazo» peruano, cerrando el Parlamento y reprimiendo cada vez más a la oposición activa.
Afirmó que el diálogo era para establecer un espacio de interlocución política para resolver la crisis del país y el gobierno se equivocó al no atender la petición del pueblo.
Sostuvo durante la entrevista telefónica que la reciente crisis con el «corralito» de los billetes de 100 bolívares que hizo arder al país fue un intento para provocar conmoción social y justificar ese asalto.
Recalcó que el reto de la Unidad democrática no soló debe ser mantenerse sino expandirse y fortalecerse.
«La mesa nació como alianza electoral, pero ahora debe trasformarse en dirección política de la sociedad democrática venezolana. En este momento no tenemos horizonte electoral a la vista, así que seguir actuando de ese modo y estar compelidos por las aspiraciones de posibles pre candidatos esta fuera de orden», dijo.
Planteó que ese relanzamiento de la Unidad se produzca antes de comenzar 2017.
«En todos los escenarios de lucha son importantes tanto las instituciones como la calle. Nuestros puntos de referencia ya no están cifrados en acuerdos para candidaturas, sino en una Unidad de propósitos. La unidad democrática tiene que plantearle al país cuál será el proyecto de reconstrucción nacional, cuáles serán las características de gobierno de unidad nacional que aspiramos y definir una ruta clara para llegar a ese gobierno. Esto tiene que ser claro, expreso y transparente. El futuro para los venezolanos no es un discurso, es un mapa, un programa de país, un proyecto nacional», Resaltó.