La iniciativa, que cuenta con el apoyo de EE.UU. y Rusia, busca impulsar legislaciones que castiguen este tipo de distracciones y concienciar a los conductores sobre el peligro que supone no prestar la atención adecuada a la conducción.
Su presentación también sirvió para anunciar una nueva directiva de la ONU a sus empleados que les prohíbe mandar mensajes por teléfono móvil (sms) mientras conducen un vehículo.
“La costumbre de distraerse mientras se conduce, ya sea hablando por teléfono o enviando mensajes, es inaceptable, tanto a los ojos de la ley como del público”, dijo el secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-moon, en la presentación de la iniciativa.
El diplomático surcoreano estuvo acompañado por el secretario de Transporte de EE.UU., Ray LaHood, así como por los embajadores de ese país ante la ONU, Susan Rice, y de Rusia, Vitaly Churkin.
En su intervención, Ban recordó que la carretera se cobra cada año en el mundo cerca de 1,3 millones de vidas, además de causar heridas a otros 50 millones de personas, que en el 90 por ciento de los casos viven en países de renta media o baja.
Asimismo, resaltó que los accidentes de tráfico son la principal causa de muerte entre los jóvenes de entre 15 y 29 años.
“Nos encontramos ante una gran amenaza que va en aumento, que son las distracciones del conductor, principalmente a causa del uso del teléfono móvil”, indicó el secretario general, quien recordó que este tipo de práctica cuadruplica el riesgo de accidente.
La combinación de 600 millones de vehículos de pasajeros y 4.600 millones de suscriptores de telefonía móvil puede resultar fatal para los intentos internacionales de reducir la mortalidad en las carreteras, según los responsables de la campaña.
En 2008, sólo en EE.UU., cerca de 6.000 personas murieron y otras 500.000 resultaron heridas a causa de accidentes causados por la distracción del conductor.
“Las distracciones del conductor no son sólo una epidemia mortal en EE.UU., son una amenaza en todo el mundo”, dijo, por su parte, LaHood, que expresó la convicciones de que todos los países pueden tomar más medidas para atajarla.
Al menos 32 países, entre ellos Rusia, Brasil, España, Francia, Jordania o el Reino Unido, han modificado sus legislaciones para restringir el uso de aparatos como los teléfonos móviles mientras se conduce, según la campaña.
Entre otras cosas, esta iniciativa cuenta con un componente digital que permitirá intercambiar noticias, propuestas y medidas entre países y organizaciones dedicadas a la seguridad vial.
La Asamblea General de la ONU adoptó en 2008 una resolución que insta a la comunidad internacional a aumentar la cooperación financiera y técnica para revertir el ascenso del número de muertos a causa de accidentes de tráfico, particularmente en el mundo en desarrollo.
En ese aspecto, Rusia organizó el año pasado primera conferencia mundial de nivel ministerial sobre seguridad vial para estrechar esa cooperación global en esta materia.