Su fallecimiento, inesperado y en su casa, fue confirmado por su socio Frédéric Dunson al diario Chicago Tribune.
Considerado uno de los padrinos de la música house, Knuckles trabajó para varios artistas de pop y soul como Whitney Houston, Michael Jackson y Depeche Mode, recordó el periódico.
Empezó su carrera como Dj en Nueva York y se instaló en Chicago a fines de los 70′. Allí, en momentos en que la música disco comenzaba a decaer, se convirtió en una de las figuras más influyentes de este estilo musical.
Como las productoras más importantes no querían firmar más contratos con los artistas disco “inventamos nuestro propio asunto en Chicago para llenar ese vacío”, incluida una productora propia, recordó Knuckles en una entrevista citada por el Tribune.
A fines de los 80′, Knuckles y varios de sus colegas eran verdaderas estrellas de la música techno que emergía en Europa.
El músico, que podía pasear por las calles de Chicago sin ser reconocido, era sin embargo acosado por sus fans cuando desembarcaba en aeropuertos europeos.
De perfil bajo y modesto pese a su éxito, Knuckles afirmó en varias ocasiones que no vivía para la gloria y la fama. “Con una linda casa propia, un buen plato de comida sobre la mesa y recibir a mis amigos me es suficiente”, afirmaba según el Tribune.