Esta reprogramación se impone luego de la decisión, anunciada este martes, de suspender hasta el 7 de enero las clases en 10 entidades y en cuatro municipios de otros dos estados, debido a la contingencia ocasionada en Venezuela por las intensas lluvias de la última semana.
Señaló que este jueves la Gaceta Oficial publica la resolución en la que se establece la suspensión de clases hasta enero en los estados Falcón, Mérida, Miranda, Nueva Esparta, Sucre, Táchira, Trujillo, Vargas y Zulia; en el Distrito Capital (DC) y en los municipios Manuel Monge y Veroes, de Yaracuy, y en Puerto Cabello y Juan José Mora, de Carabobo.
Explicó que las orientaciones que dictará el Ministerio incluirán una estimación del contenido académico desarrollado hasta ahora, y definirá los procesos evaluativos y las unidades didácticas que se impartirán el año que viene.
“En las medidas extraordinarias debemos insertar el cronograma. No sólo será la reprogramación desde el punto de vista pedagógico, didáctico, de las unidades didácticas contextualizadas que desarrollaremos de acuerdo con las áreas del conocimiento, sino que además debemos decir en qué tiempo se va a valorar”, detalló.
Gil precisó, con respecto a las evaluaciones, que “debemos tener cuidado con los procesos evaluativos”, pues los “estudiantes del subsistema de educación básica no son responsables de los embates de la naturaleza”.
“Debemos ser responsables de su derecho y de la protección en su desarrollo educativo”, agregó.
Acotó que evalúan la fecha de culminación del año, para adecuarse a la obligatoriedad de los 200 días de clases establecida en la Ley Orgánica de Educación (LOE).
En torno la necesidad de usar días extraordinarios de clases, indicó: “Quizá el cambio tenga que ver más con estrategias a utilizar”, y recordó que también deben respetar los derechos de los trabajadores de la educación.
La ministra añadió que también trabajarán en una homologación relacionada con el cumplimiento de los programas curriculares en educación primaria y secundaria, pues parte de los estudiantes no sufrió los embates de las lluvias y, por tanto, no tuvo problemas en sus actividades académicas.
Flexibilidad curricular
La ministra del Poder Popular para la Educación destacó que la flexibilidad curricular que contempla el artículo 6 de la LOE permite suspender las actividades, en aras de atender las consecuencias de las lluvias en el país.
“Estamos en una circunstancia especial. Venezuela ha sido duramente golpeada por un fenómeno atmosférico que supera la voluntad humana, ante circunstancias especiales, medidas extraordinarias”, acotó.
Rechazó las críticas del presidente de la Cámara Venezolana de Educación Privada (Cavep), Octavio de Lamo, quien calificó la medida de suspensión de clases de “inconveniente», “improvisada” e “irresponsable”.
Gil consideró esta posición como una opinión divisionista que defiende intereses mercantiles. “Somos responsables ante el país, ante los padres y representantes, de haber tomado estas medidas. No estamos aquí para complacer peticiones ni gustos de ciertos sectores, que lo que han hecho es dividir la nación”, comentó.
Tras casi 15 días de intensas lluvias en Venezuela, 31.600 familias, conformadas por 124.000 personas, están albergadas en 851 refugios habilitados en todo el país. 35 fallecidos y seis desparecidos han sido reportados. Ocho entidades fueron declaradas en emergencia.