Así lo reseñó La Verdad
Desde tempranas horas de la mañana de ayer funcionarios del Ejército se apostaron en las gasolineras para controlar los expendios de carburantes.
La presencia de efectivos tuvo como objetivo supervisar las ventas del producto por vehículo, como una manera de evitar las actividades del “bachaqueo”.
Durante los fines de semana anteriores, surtir de gasolina los tanques de los vehículos en las bombas de la zona fue todo un desafío, debido a las largas colas y desabastecimiento.
Las estaciones de servicio de La Limpia, así como las que están ubicadas en el norte de la ciudad, son las más frecuentadas por quienes se dedican a la compra del carburante para el contrabando.
Los llamados “bachacos”, cuyos vehículos tienen tanques de gasolina adulterados, acaban con el producto de todas las bombas, obligándolas a cerrar.
Henry Manzanillo, trabajador de una gasolinera ubicada al final de La Limpia, aseguró que dos funcionarios del Ejército se apostaron en el lugar en horas de la mañana, mientras que otro par se instaló a las 2.00 de la tarde.
Los efectivos notificaron a los empleados que supervisarían las ventas, de manera que a los carros particulares sólo se les suministrara tres bolívares fuertes de carburante, mientras que al transporte público y vehículos de carga se les proporcionara hasta cinco bolívares fuertes.
Adicionalmente, a las 3.30 de la tarde la estación de servicio fue cerrada, luego que los empleados fueron notificados que recibirían un taller sobre los lineamientos de cómo debían trabajar.
A mediados del año pasado el Ministerio de Energía y Petróleo (Menpet) emitió una resolución a través de la cual fijó topes máximos para la venta de gasolina en las bombas ubicadas en el norte y el oeste de Maracaibo, como una medida para reducir el contrabando de extracción.
Las gasolineras que tienen restricciones en la venta de carburantes son las que están al final de las avenidas La Limpia, Guajira y Fuerzas Armadas.
Supervisión
José Mejías, trabajador de una estación de servicio al final de La Limpia, comentó que el Ejército informó que los operativos de supervisión se mantendrían en los próximos días.
Indicó que ante la presencia de los efectivos, ayer no hubo mayor presencia de vehículos en el lugar, por lo que no se formaron las largas colas ni se agotó el combustible.
Jorge Troconis, usuario, consideró que la medida del Ejército fue positiva, porque ayuda a controlar la situación, sobre todo los fines de semana.
“En cierto modo esto es bueno, pero lo importante es que no sólo se quede en una supervisión, sino que la presencia sea constante. Que no pasen en un momento determinado, sino que se mantengan en el sitio”.
Opiniones
Adafer Gutiérrez. Trabajador de una gasolinera de La Curva. “Nosotros estamos trabajando normalmente. El Ejército se quedó en las estaciones de servicio sobre las que han recibido denuncias. Nosotros no tenemos inconvenientes”.
Arsenio Villalobos. Trabajador de una gasolinera de La Curva. “Los militares nos dijeron que vendiéramos lo mínimo, que son tres y cinco bolívares, porque nos iban a estar supervisando, que cualquier cosa era nuestra responsabilidad”.
Yoleida Bracho. Trabajadora de una gasolinera de La Limpia. “Aquí todavía no nos ha llegado el Ejército. Nos dijeron que para acá también viene la normativa. Por ahora estamos trabajando normal y tenemos gasolina disponible”.