Según el parlamentario, es tiempo de que los altos dirigentes del país, comenzando por el primer mandatario y sus más cercanos colaboradores, reflexionen sobre las políticas que planifican imponer, como por ejemplo la llamada tarjeta del buen vivir, que en su opinión, está inspirada en la tarjeta de racionamiento en Cuba, la cual podría desaparecer paulatinamente. “Este aspecto, como muchos otros, debe ser analizado por el gobierno venezolano, que tanto ha pregonado su cercanía con el gobierno cubano”, aseveró.
También hizo referencia al reconocimiento del mercado que se ha producido en Cuba, aunque de forma tímida, como punto para la evaluación de la ideología que se pregona por el sector oficial del país. Recordó que hace pocos meses se produjo el despido de trabajadores públicos en la isla, y citó el plan de apertura hacia el sector privado que se ha aprobado por el gobierno cubano.
“Nos llama la atención que además en Cuba se ha hecho una diferenciación entre el gobierno y el partido político, y las tareas y atribuciones de cada uno, mientras que aquí es totalmente diferente, porque se pierde la frontera entre uno y otro, lo cual trae consecuencias terribles para el país”, señaló del diputado de la bancada de la UNIDAD.
Resaltó el reconocimiento por la urgente descentralización que hizo el mandatario cubano, como otra lección al gobierno venezolano, así como también la importancia de disminuir los períodos de mandatos en el poder. “Si es cierto que en Cuba está lo más cercano a lo que quiere implantar el Presidente en nuestro país, entonces debería seguir estos planteamientos, para evitar quedarse más solo que la una”, sugirió Mendoza.
“El contraste entre los planes del Presidente de Cuba, y los de su principal aliado, el Presidente venezolano, se hace cada día más evidente, de allí nuestro exhorto a pensar en lo que beneficiaría a los ciudadanos”, concluyó el diputado de la Asamblea Nacional.