“Lo único es que le doy gracias a todos los que de una u otra forma me ayudaron en mi carrera. Gracias a ustedes, los periodistas, que llevaron mis logros a la gente. Lamentablemente, compromisos familiares me hicieron tomar esta decisión”, dijo el de Agua Negra con lágrimas en los ojos.
“Le pido perdón a todos por esta decisión, porque quería continuar, pero no puedo seguir en esto”, contó.
Su versatilidad lo convirtió en un pelotero apreciado por todos los dirigentes. Podía jugar en los jardines y el infield. Lo único que le faltaba era ser receptor.
El mencionado fue el gran ídolo de los fanáticos magallaneros. Desde la fecha de su estreno hasta la temporada 2001-2002 nunca dejó de uniformarse con los del Cabriales. Fue miembro de los equipos que le ganaron par de finales a Leones (93-94 y 96-97). También tomó parte de las últimas instancias en las zafras 95-96, 99-00 y 00-01. En esa última le pasó el testigo de la popularidad a Endy Chávez.
“Me siento bien, mis piernas se sienten bien, pero sería irresponsable de mi parte si mi bate está lento. Pero cosas mayores, que es mi familia, me hicieron tomar esta decisión”, destacó.
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