Araceli García, residente del sector La Esmeralda, tiene 31 años viviendo en ese lugar, acompañada de unos vecinos, informó que las cuatro manzanas de ese sector están totalmente deterioradas, debido a que el agua del lago llega a las viviendas, por el sistema de cloacas.
“Cuando llueve vivimos una eterna zozobra, primero por lo cerca del lago de Valencia y también a un lado nos pasa el Río Madre Vieja, que cada vez que se desborda y las casas se nos convierten en piscinas”, dijo García
García manifestó que cada día el reservorio natural continúan en ascenso, las primeras casas ubicadas muy cerca de las riberas del lago, fueron desalojadas, pero aún quedan cien familias a la espera de respuesta por parte de las autoridades.
-Luego de un aguacero, solo vienen funcionarios de Protección Civil Aragua, a constar si el nivel del agua subió y a realizar un censo de cuantos afectados somos por el desbordamiento del río, dijo García.