Además envió un abrazo a todos sus fans, poco antes de abordar la camioneta que lo trasladaría hasta el hotel donde descansará antes de su presentación en el Poliedro de Caracas.
El cantante se mostró risueño, saludó a la gente y bromeó con los presentes a través de la ventanilla de la camioneta.
Durante el día se especuló con la posibilidad de que Marc Anthony llegaría directamente para participar en el concierto de esta noche, por lo que no dormiría en suelo venezolano.
El miércoles, el lobby del Hotel Gran Meliá Caracas no estuvo atestado de fans enloquecidos, como era de suponerse.
Tampoco fue custodiado por guardaespaldas ni agentes de seguridad.
Y aunque no hubo fanáticos, en el interior del hotel, ubicado en la avenida Casanova de Sabana Grande, se escuchaban sin embargo murmullos -y también especulaciones- acerca de cómo sería el recibimiento de la estrella boricua, y si llegaría o no con su esposa, la actriz y cantante neoyorquina Jennifer López.
«Lo que hemos notado es que viene en plan humilde, bajo perfil, y ni siquiera viene con Jennifer López», susurró un ejecutivo del hotel que prefirió el anonimato.
Los productores del show le reservaron a Marc Anthony la Suite presidencial del Meliá, y no el piso entero, como ha especulado la prensa rosa en diversos programas de televisión. Mientras que su comitiva será ubicada en habitaciones aledañas. Esto es: manager, músicos, productores, y técnicos de sonido e iluminación.
La del cantante será una habitación de 370 metros cuadrados, de dos alas, claraboya en el techo, servicio real, una colección de muebles de los siglos XVII y XVIII, la cual ha tenido que ser acondicionada de acuerdo con los requerimientos del astro de la música: cortinas, sábanas y mantelería color blanco limpio insuperable.
No pudieron cambiar, eso sí, aclara el ejecutivo del hotel, el color de la alfombra, que permanecerá de rojo con detalles dorados.
Es tan poco el tiempo que pasará el cantante en Caracas que ni siquiera se hicieron reservaciones para los servicios de spa y gimnasio en el recinto de cinco estrellas. Mucho menos recibieron los encargados del hotel la exigencia del cantante de utilizar la piscina de forma exclusiva. Después de todo, la Suite Presidencial tiene además una sala con piscina privada y jacuzzi.
Tanto en la habitación como el camerino no deberán faltar dieciocho velas blancas sin olor y con un diámetro exacto de tres centímetros, vino Opus One Cabernet Sauvignon y tequila Patrón Silver. Pero los empleados del hotel juran que nada de esto está a su cargo, pues la productora de espectáculos Solid Show es en realidad la responsable por hacer cumplir las exigencias del cantante, quien en esta ocasión viene a interpretar los temas de su álbum Íconos, en el que realiza versiones de clásicos de José Luis Perales, José José, Roberto Carlos y Juan Gabriel.
Apenas finalice el show, comenta uno de los organizadores del espectáculo, Marc Anthony regresará al hotel, por estos días repleto de ejecutivos asiáticos que asisten a una convención sobre energía y petróleo, luego tomará su avión privado y se marchará rumbo a Estados Unidos.
Riesgo de cancelación
A un día de realizarse el show de Marc Anthony se dio a conocer que Solid Show no había presentado los documentos requeridos ante la Superintendencia Municipal de Administración Tributaria para realizar el concierto y el Solid Fest, por ello, corrían el riesgo de ser cancelados. «Han exagerado un poco. Hoy se soluciona todo», señaló la jefa de prensa de la productora. Horas después, los organizadores indicaron que las fechas siguen en pie.