De una brutal golpiza fue asesinado —aparentemente, por equivocación— Yorbis José Martínez Manzanillo, un latonero de 30 años, delante de su concubina, en el interior de una vivienda, donde residía alquilado desde hace dos meses, en el barrio Jaime Lusinchi, al oeste de Maracaibo.
El hecho se registró específicamente en la calle 14 con avenida 5 del referido barrio, a la medianoche, relató la pareja del fallecido, Gladys Álvarez.
Contó que ambos dormían en la habitación cuando dos hombres, de la etnia wayuu, llamaron a la puerta y su marido los recibió. “Los tipos, sin mediar palabras, comenzaron a darle golpes con tubos, palos y piedras a mi hermano. Mi cuñada trató de intervenir para que lo dejaran, pero a ella la empujaron y siguieron maltratándolo”, narró Yorbelín Martínez.
Mencionó que los delincuentes sacaron a la fuerza a su ser querido y lo lanzaron a la calle y lo arrollaron con un vehículo gris. Le partieron todas las costillas.
“Después dijeron que se habían equivocado con Yorbis, que no era él a quien buscaban y le dijeron a la mujer que sacara los corotos de la casa porque la iban a quemar”, dijo Yorbeína Martínez, otra hermana del infortunado.
Indicó que los hampones quemaron también, en el mismo barrio, la residencia de una tía del hombre que querían matar. Luego le prendieron llamas la casa de su sobrina. “A ella la sacaron por una ventana, le golpearon la cara y la interrogaron. Querían que les dijera dónde estaba su tío porque lo estaban buscando para acabar con su vida”, dijo la pariente del latonero.
Yorbis Martínez fue trasladado por sus vecinos al Hospital Universitario. Ingresó a la 1:00 de la madrugada y murió cuatro horas después.
Agregó que los sujetos buscaban al dueño de la casa, donde residía Yorbis, porque le disparó a un hombre en una miniteca. “Los familiares le juraron que lo iban a matar. El muchacho que hirió está en el ‘Universitario’. Ésto fue una venganza, pero mi hermano pagó las consecuencias”,expresó Martínez.
Vía Panorama