Maduro y Holguín analizarán juicio contra exministro hondureño

  Los cancilleres de Colombia, María Ángela Holguín, y de Venezuela, Nicolas Maduro, llegarán el jueves a Honduras para constatar si un juicio al exministro hondureño Enrique Flores se realiza con total imparcialidad, anunció este martes el presidente Porfirio Lobo.

“La Comisión de Seguimiento (integrada por Holguín y Maduro) viene el jueves para ver los casos (acusaciones)” contra el ex ministro de la Presidencia en el gobierno de Manuel Zelaya y verificar “si hay total imparcialidad”, dijo Lobo en una rueda de prensa en el caribeño Puerto de Trujillo, 600 km al noreste de la capital, informó AFP.

Los cancilleres integran una Comisión de Seguimiento del Acuerdo de Cartagena, que hizo posible el regreso al país -desde su exilio en República Dominicana- del derrocado ex presidente Manuel Zelaya y, consecuentemente, el regreso de Honduras a la Organización de Estados Americanos (OEA).

Lobo hizo un llamado al Poder Judicial para que “haga las cosas enmarcado en la ley y en total imparcialidad” y afirmó que “no debe haber persecución para nadie”.

Flores, ex ministro de la Presidencia de Zelaya, que fue derrocado en un golpe de Estado el 28 de junio de 2009, está bajo arresto domiciliario desde el pasado miércoles, acusado de dos supuestos delitos de peculado.

Zelaya ha denunciado que el arresto de su ex ministro constituye una violación al pacto de Cartagena, firmado el 22 de mayo por él y el presidente Lobo, el cual garantiza que no habrá revanchas políticas contra los miembros de su gobierno.

El juez Claudio Aguilar, quien ordenó el arresto, amenaza con recluir a Flores en un centro penitenciario si este no cancela en el plazo de un mes una fianza de 3 millones de dólares.

Flores, quien se declaró “imposibilitado” para pagar esa suma, calificó la resolución como “sicariato judicial” y alegó que el juez recibe presiones de los “golpistas” que derrocaron a Zelaya.

El ex ministro está acusado del desvío de 5,6 millones de dólares para pagar propaganda de una consulta nacional que pretendía realizar Zelaya sobre una reforma constitucional, la cual fue el detonante del golpe, en el que participaron el Ejército, el Congreso y la Corte Suprema de Justicia.

Lobo se ha excusado por la situación de Flores diciendo que él no tiene control sobre el Poder Judicial, que sigue controlado por partidarios del golpe.