A través de sus redes sociales el economista indicó sus consideraciones sobre la última medida tomada por el BCV ante la pérdida atroz del poder adquisitivo del venezolano, y en un intento por parar la escalada del precio de la moneda extranjera.
Durante años resaltamos la necesidad de abrir el mercado cambiario para rescatar los equilibrios económicos del país. En algún momento del pasado, esa acción pudo ser determinante para resolver muchos problemas. Pero hoy, aplicada por la presión de una crisis monumental, la ausencia total de confianza en el gobierno y sus instituciones, incluida las autoridades monetarias y signado además por las sanciones internacionales que llevan a la negativa de bancos corresponsables a operar las instituciones públicas y las graves dificultades ocasionadas por el “over compliance” a las operaciones financieras del sector privado, está resulta una acción insuficiente, difícilmente operacionalizable e incapaz de provocar mejoras significativas en la economía nacional. Tarde piaste pajarito.